La realidad del mercado inmobiliario en Leganés

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El interés por la compra de vivienda en la localidad de Leganés es una realidad. Ante este hecho, desde Leganés Activo realizamos un balance de las opciones que ofrece el mercado inmobiliario en el municipio. ¿Existe vivienda pública? ¿cuál es la calle más cara? ¿Y la más barata? ¿Recomiendan los vecinos de EMSULE adquirir inmuebles de esta empresa pública? Respondemos a estas y otras muchas cuestiones.

En un mes se realizan alrededor de 500.000 búsquedas de vivienda en el municipio de Leganés. Cerca de dos tercios de ellas corresponden a domicilios en venta, el otro tercio a viviendas en alquiler, según Idealista. El interés por la compra de vivienda en nuestro municipio es un hecho. A la hora de hacerlo, los potenciales compradores tienen la opción de recurrir a las viviendas del mercado libre o a las pertenecientes a la empresa pública de Leganés.

En comparación, el metro cuadrado de vivienda a precio de mercado y el de vivienda de EMSULE presentan ciertas diferencias. Mientras que en un domicilio de EMSULE el m2 -incluyendo el valor del garaje obligatorio- lo encontramos a unos 1734 euros a la hora de comprar, el de vivienda de mercado está valorado en una media de 1637€, tal y como recoge el último informe de Precio Viviendas. Un precio, aunque menor, no muy distante.

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La calle más cara del mercado libre

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Anuncio de Vicente Ferrer, 17 citado por una de sus propietarias

Según la valoración del informe Precio Viviendas, el precio de algunos de los inmuebles ubicados en la misma calle que algunos de los pisos EMSULE de Poza del Agua está subiendo como la espuma. La avenida Vicente Ferrer es una de las que cuentan con los pisos más caros del municipio a fecha de septiembre 2017. El precio medio del metro cuadrado es de 2.428€. La escasa antigüedad de los edificios, menos de cinco años, apunta como la causa principal de dicha cuantía.

Entre las ubicaciones más caras de Leganés también se encuentran la avenida Reina Sofía, calle Alegría, calle de Los Frailes, calle Agustinos o incluso la Plaza de la Fuente Honda. Por el contrario, los inmuebles valorados como los más baratos son hallados en la avenida Libertad, calle de San José o calle Fátima, en el barrio de La Fortuna. Otras destacables son calle de Batalla de Brunete, calle Río Nervión y calle Río Duero.

Unas estadísticas que fluctúan cada día ya que la demanda sigue en aumento. Según afirman varios portales de compra-venta de pisos e inmobilirias, la escasa oferta no calma a la amplia demanda lo que ha llevado a muchos a buscar alquileres. «Los precios se han disparado porque el anuncio de un piso en alquiler no dura ni dos días colgado. La gente está en constante búsqueda«. Algunos, achacan este dato a los futbolistas del CD Leganés y lo que arrastran, otros, a los estudiantes de la Universidad Carlos III -responsables del auge de habitaciones en alquiler-. Lo cierto, es que se trata de una confluencia de ambos.

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Precios por encima de la realidad

Los expertos de economía recomiendan que los gastos de alquiler/hipoteca no sobrepasen el 30% de los ingresos. Teniendo en cuenta que, según datos del Instituto Nacional de Estadística, en España el sueldo más habitual no supera los mil euros, este porcentaje supone apenas 300€. Sin embargo, por este precio no podemos encontrar una vivienda de alquiler en la zona sur de Madrid.

Actualmente, los alquileres de la zona sur de Madrid superan los 400€, es decir, disponibles para aquellos cuyo salario supere los 1.300€. Sin embargo, sí existen algunas hipotecas, a muy largo plazo y para pisos de escasos metros cuadrados, en las que poder pagar 250€ al mes. Unos datos que hacen que muchos se sigan decantando por la compra antes que el alquiler.

Con todo, la Plataforma de Afectados contra la Hipoteca de Leganés (PAH Leganés) ha denunciado en numerosas ocasiones las dificultades de muchos ciudadanos para acceder a una vivienda. Desde hace años, demandan la implantación de alquileres sociales en función de la renta de estas personas en riesgo de exclusión. Según las cifras que manejan, en la localidad existen unas 200 viviendas vacías, 140 de ellas de EMSULE, el resto del consorcio urbanístico de Leganés Norte.

Requisitos sociales para las viviendas de EMSULE

Para obtener una vivienda EMSULE en 2013 se debía cumplir con una serie de requisitos como ser habitante de Leganés o no superar el umbral del sueldo mínimo interprofesional. Quienes los cumplían, entraban en una bolsa entre los que se sorteaban los pisos. Sin embargo, después de quedar desierto el último sorteo, los últimos pisos quedaron abiertos al mercado libre.

Asimismo, estos últimos pisos, con 60 m2 de media y plaza de garaje obligatoria en la mayoría de casos, implicaba el pago de una entrada en torno a un 20% del valor total de la vivienda. Es decir, dicha entrada rondaba los 20.000€ en 2013. Hoy en día, para comenzar a pagar un piso de EMSULE, se debe contar al menos con 40.000€, tal y como explica dicha empresa a los interesados.

Bajas calidades y pobre construcción

EMSULE Poza del Agua Vicente Ferrer Tubería
Una de las tuberías de Vicente Ferrer, 17

Para conocer el estado de los pisos construidos por EMSULE, nos remitimos a las palabras de los vecinos de Poza del Agua. Algunos de ellos como Luis tuvieron problemas desde la primera semana. «Empezaron a salirme goteras«, cuenta el que fuera expresidente de comunidad de Vicente Ferrer, 17. Sin embargo, no fue el único con problemas nada más mudarse. «El piso nos lo entregaron lleno de arañazos», afirma otra de las vecinas del mismo inmueble.

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Lo cierto es que aún hoy esta comunidad de vecinos afronta averías en saneamiento y calefacción de forma habitual. «Cada mes tenemos una media de una o dos averías. Por ejemplo, nos cortan el agua caliente. Cuando no pasa eso, son los grupos de presión (…) Pasados tres o cuatro años, seguimos teniendo ese tipo de problemas, sigue reventando alguna que otra bomba (de los grupos de presión) y continuamos teniendo fallos de calefacción. Rompen los codos de las tuberías«, comenta Luis.

«Nos hemos tenido que limpiar con toallitas por las mañanas«, cuenta una de sus vecinas para ejemplificar los cortes de agua. “Lo anuncian como máximas calidades, y el edificio que publicitan es el nuestro…”. Aunque sonríe por lo sarcástica que resulta la situación para ella, se aprecia resignación en su tono de voz. «Es algo que te va minando«, añade Luis.

Una vivienda ‘digna’

Aunque algunos vecinos están contentos con su vivienda de EMSULE, otros argumentan que se sienten estafados. No solo por las deficiencias en las instalaciones del edificio, sino por el precio. Aunque supuestamente son viviendas dirigidas a aquellos que cuentan con menos recursos, en la práctica no es así. «Con respecto a un piso de renta libre ahora mismo no hay mucha diferencia«, declara el ex presidente. «Estoy muy arrepentido de haber comprado aquí», concluye.

«Se les llena la boca de decir que están ayudando a los jóvenes a conseguir una vivienda digna. Digna sería que no tuviera problemas. Yo me conformaría con eso”, comenta el ex presidente de comunidad de Vicente Ferrer, 17.

Una remodelación obligada

La comunidad que él entonces presidía presenta otros problemas achacados al rediseño del edificio. Ese rediseño del que hablan acarreó otros problemas como la falta de ventilación de los pisos y las dificultades de acceso de los discapacitados a su portal. De hecho, los planos de construcción no se corresponden con la realidad ni tampoco el coeficiente de la vivienda, tal y como ellos sostienen.

Creo que pago más IBI del que debería por el piso que tengo porque está mal hecho”, explica una de las vecinas. La misma añade, “No digo que ellos (EMSULE) no lo intenten, pero nos prometieron que para junio o julio esto estaría arreglado y aquí seguimos igual. A la nueva empresa de gestión energética que tenemos la han preguntado qué se puede hacer o cómo se puede solucionar y esa empresa ha venido, ha mirado los planos que tenemos y es que no son reales”.

«Nos enteramos de que este edificio en un inicio iba a tener menos viviendas de las que están ahora mismo ya construidas. Como EMSULE para darse más bombo quería más viviendas de cara a la promoción de toda la zona, obligó a los arquitectos a rediseñar el edificio. Por eso hay viviendas en las que la ventilación no está cerca de donde tiene que estar«, incide Luis. El edificio que EMSULE publicita en sus carteles posee ventiladores eléctricos en la azotea para paliar dicho déficit. No obstante, dicho apaño también ha supuesto un quebradero de cabeza para algunos de los vecinos de Vicente Ferrer, 17.

«Al estar funcionando todo el tiempo (los ventiladores eléctricos), se rompían. De hecho nos dijeron que había piezas que ya venían mal de inicio por la constructora y hemos tenido que pagar nosotros«, asevera Luis. Otra de las vecinas apoya su punto de vista. El olor a comida o incluso a cloaca ante dicha falta de ventilación son los hechos que ambos nos trasladan.

EMSULE, constructora sin fines sociales

Con todo esto, los inquilinos insisten en que, para ellos, EMSULE ha perdido su función social para facilitar las viviendas a aquellos que lo tienen más complicado, para convertirse en una inmobiliaria más. Algo que comparten con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.

«Ahora mismo EMSULE no tiene ninguna función social en el municipio, tiene una función de mercado«, esclarece Felicitas de PAH Leganés. «Esas viviendas se han construido con dinero público y en suelo público. Su función tiene que ser social. Deben cubrir las necesidades de la gente que en nuestro municipio no pueda acceder a una vivienda«, apunta la misma.

No es la única voz que señala la escasa vocación social de EMSULE. Aunque la empresa tenga carácter público y oferte viviendas con ese tipo de protección, algunos vecinos de Poza del Agua también claman contra la supuesta búsqueda de beneficios de la corporación pública.

«El Ayuntamiento ayudas como tal no dio absolutamente ninguna. O sea EMSULE no ayudó para nada. Digamos que se benefició para tapar el agujero económico que tenía en ese momento inflando el precio de las viviendas porque no está acorde a las calidades que supuestamente han puesto (…) De hecho en las instalaciones se está viendo que están fallando por todos los sitios y que están como están«, concluye Luis, ex presidente de comunidad de Vicente Ferrer, 17.

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