AROA DÍAZ / La línea 12 de Metro de Madrid, conocida como MetroSur, continúa siendo uno de los tramos más caros y menos rentables de la red de suburbano a pesar de los grandes planes con los que contaba el Consorcio de Transportes. Esto ha provocado agujeros en el presupuesto que, desde la dirección, intentan suplir.
En los últimos años, la línea 12 –junto con la línea 10 a su paso por Nuevos Ministerios y los ramales más alejados del centro de Madrid-, ha sido uno de los tramos más temidos por los conductores de la red de Metro de Madrid. Y es que, el desgaste de la línea y «las prisas» en su construcción, han hecho que sean los que más veces se han tenido que reparar.
«El servicio fue empeorando desde hace dos años, antes de las obras ya era penoso. En Getafe, ibas a 80 km/h, era terrorífico«, nos comenta Julián Gómez, portavoz del Sindicato de Conductores de la red de Metro de Madrid.
Esta situación, paliada levemente con las obras de mejora de las instalaciones, fue derivada, precisamente, de la falta de presupuesto para mantenimiento así como por los defectos estructurales con una solución muy complicada. «Se abren goteras y filtraciones a lo largo del recorrido cada poco tiempo debido a los acuíferos«, nos explica otro conductor perteneciente al sindicato.
Estos problemas han provocado que la línea 12 continúe, a día de hoy, siendo uno de los problemas económicos para Metro de Madrid.
Sin embargo, el consejero delegado de Metro de Madrid, Ignacio González Velayos, aseguró este miércoles en un desayuno informativo que «el transporte público no tiene que ser rentable económicamente sino socialmente«. Un aspecto que, según algunos trabajadores tampoco se cumple.
«Hicieron los andenes para ricos«, explica Gómez, «las estaciones están diseñadas para convoyes de 6 trenes pero, debido a la escasa demanda, los que circulan, sólo llevan 3«.
En su intervención, González Velayos anunció algunos de los planes que la red de suburbano está manejando para poder paliar este y otros agujeros económicos con los que cuenta Metro de Madrid y aumentar el presupuesto de la red en más de un 60% durante el próximo año.
Entre ellos, se encuentran la instalación de paneles de publicidad en el interior de los túneles, la creación de una marca comercial con la venta de merchandising –como camisetas, llaveros o gorras-, la venta de servicios de consultoría –muy demandados por América Latina en la actualidad- y creación de espacios comerciales como el nuevo gimnasio de Nuevos Ministerios, el primero en el interior de una estación de metro, así como los servicios de patrocinio.
Con ello, González Velayos aseguró esperar «no ser una carga para el despegue económico de la Comunidad de Madrid» y poder continuar congelando el precio del billete, como hiciera este año.





