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Imagen de la manifestación de octubre |
AROA DÍAZ / Un grupo de trabajadores del Hospital Severo Ochoa han salido a las puertas del centro para reivindicar las malas condiciones en las que se encuentran trabajando. La escasez de medios y los recortes de plantilla han provocado que, un año más, las urgencias se hayan encontrado saturadas provocando más de 10 horas de espera para los pacientes.
Desde comienzos de año, la situación en las urgencias del centro hospitalario es calificada como «lamentable» por pacientes y trabajadores. A las críticas vertidas por CC. OO. y PSOE el pasado mes, se le han unido las de la Federación de Servicios Públicos de UGT. quienes aseguran que la situación se «ha descontrolado«.
Por ello, los trabajadores sanitarios han salido de nuevo a las puertas del centro para manifestar su descontento con la situación y poner de manifiesto sus críticas. Han señalado a la falta de trabajadores y el cierre de camas que se ha venido sufriendo desde el verano como principales causantes de esta situación.
De esta forma, aseguran, la sala de urgencias está siendo ocupada por personas que, en realidad, deberían estar siendo atendidas en planta pero que no pueden debido al recorte en el número de camas. Así, los pacientes que realmente deberían ocupar ese espacio, los de urgencias, deben esperar a que se libere.
No obstante, desde la consejería de Sanidad continúan insistiendo en que se trata de un repunte asistencial con motivo de la gripe propia del invierno y que la situación recuperará la normalidad en unas pocas semanas, algo que desde ambos sindicatos desmienten.
Debemos recordar que un gran sector de la población se ha visto desprovisto de su tarjeta sanitaria tras la entrada en vigor del Real Decreto Ley 16/2012. Esto significa que, para ellos, el único acceso posible al sistema sanitario es a través de las urgencias, lo que se traduce en un mayor número de pacientes y, por consiguiente, un colapso.