Las protestas de los empleados municipales han provocado por segunda vez el suspenso de la sesión plenaria del mes de mayo después de haber intentado celebrarse a puerta cerrada con la negativa de los grupos de la oposición. Los trabajadores protestaban contra la externalización del mantenimiento de lo edificios públicos.
Este lunes 23 se celebraba la segunda parte del Pleno de mayo. Se trataba de la reanudación de la sesión del pasado jueves 12, suspendida por las continuas protestas de los empleados municipales, el mismo motivo que ha vuelto a provocar la suspensión de la sesión.
«Exigimos coherencia al equipo de gobierno, que lejos de proponer la privatización de ningún servicio público en sus respectivos programas electorales, plantearon la posible remunicipalización de servicios privatizados», denuncia el Comité Unitario de Trabajadores en un comunicado. Sin embargo, para el alcalde, Santiago Llorente, se trata simplemente de una excusa mientras que las reivindicaciones giran en torno a la exigencia de un aumento salarial.
El Gobierno local intentó celebrar primeramente la sesión a puerta cerrada conociendo que se preparaban las protestas; a su inicio decidió un receso de media hora para, a la vuelta, suspender la sesión por segunda vez. Se trata del segundo frente laboral abierto al Gobierno local en dos semanas.
