Tras la dimisión del concejal Javi Blanco, Mercedes Condés ha puesto de relieve los problemas internos que están surgiendo en el grupo municipal, derivados en parte por la falta de transparencia y la gestión del dinero donado por los concejales para el partido. «Podemos Leganés junto a otros agentes lanzamos este proyecto no para lo que está siendo», declaraba la concejala en rueda de prensa.
En la última rueda de prensa, la ruptura en el seno de Leganemos ha sido patente. Se ha realizado al respecto de la información publicada por Al Día Leganés en la que se denunciaban que Mercedes Condés cobraba más de lo acordado por su código ético: tres veces más que el salario mínimo, para poder cumplir con esta limitación, los concejales donan el sobrante de sus sueldos a un ‘fondo social’ gestionado por el grupo municipal.
Sin embargo, Condés no aportaba a este fondo las retribuciones por su trabajo en el Hospital Severo Ochoa hasta hace unos meses. «De esa nota casi todo es correcto excepto el titular [Una concejala de Leganemos incumple el Código Ético]«, explicaba Fran Muñoz, portavoz del Grupo Municipal.
«Es una pena que Leganemos, que es un proyecto ilusionante, acaben trasladando una idea de impotencia y desilusión de que todo sigue igual, como tradicionalmente ha protagonizado la izquierda en este país, conmigo para eso no van a contar«, aseguraba Adrián Sánchez.
A continuación, la propia afectada reveló que la información pudo ser revelada por «gente de Leganemos«, lo que provocó malestar entre los compañeros del partido que ofrecieron la rueda de prensa, Fran Muñoz, Eva Martínez y Adrián Sánchez. «Nos gustaría que fuera un modelo asambleario cosa que se veta en muchas ocasiones que las cosas se lleven a la asamblea«, declaró la concejala justo en el momento en el que sus compañeros de partido abandonaron la sala. «Mis compañeros se han ido porque los temas escuecen«, justificó.




Tarde o temprano tendría que pasar. A mayores de otras consideraciones resulta curioso que en aquellos sitios donde está Mercedes Condés y sus «comisarios políticos» de IA metidos haya problemas graves, asambleas manipuladas, acaparación de puestos, ninguneos, insultos constantes, agresiones físicas (como la realizada contra el portavoz de Leganemos a la salida de una asamblea o la que estuvo a punto de suceder en la «oficina» de coordinación de campaña en las elecciones del 20D en la AAVV de Zarzaquemada por uno de los «comisarios políticos» del grupúsculo que fagocita Podemos Leganés y lo desactiva salvo para sus mamandurrias de IA (la mayoría de sus «actos» los protagonizan conocidos miembros de IA)).
Curioso que este grupúsculo que fagocita el CC de Podemos Leganés en minoría (ni siquiera son la mitad del mínimo requerido) y su SG Mercedes Condés pidan ahora la dimisión de todos l@s concejal@s de Leganemos para elegir nuevos concejal@s pero se niegan a hacer lo mismo en el CC de Podemos Leganés, cuando lo llevamos reclamando más de un año, para acabar con los gravísimos problemas internos que arrastra Podemos Leganés….. Simplemente elegir nueva gente que ponga Podemos Leganés a funcionar sin que los anteriores CC se puedan presentar…. Y no hay manera, se agarran al sillonball como garrapatas…..
En fin, que con la vieja política, esa que ya no «compra» nadie (IA no tuvo más de 30.000 votos en toda España la última vez que se presentaron), hemos topado, y con sus mismas formas… Tienen una «hoja de ruta» que incluye fagocitar POdemos y para ello usan los mismos métodos donde haga falta. Sabemos de sus «maneras» en Leganés, pero también en Rivas VAciamadrid, en Parla, en Getafe, en Móstoles, en Alcorcón, etc.. etc.. etc…. Exactamente las mismas «maneras»…
A ver si se aplican el cuento y dimiten tod@s los del CC y la SG de Podemos Leganés y podemos hacer un Podemos Leganés más «limpio» y realmente democrático y de paso limpiar Leganemos…..
Coherencia dicen.
esto tenia que pasar tarde otreprano
Estaría muy bien que la persona que firma el bochornoso comentario anterior saliese de su anonimato («Marco»), pusiese su verdadero nombre y comprobásemos quien dedica su tiempo a lo peor de la vieja política sectaria. En el mejor de los casos, sería al menos valiente. En el peor, afrontaría las consecuencias jurídicas de cometer injurias en público y las consecuencias políticas de difamar sin pruebas.