«Leganés es una ciudad muy importante para mi y me siento arropada y querida«, asegura Claudia Traisac, actriz pepinera que triunfa actualmente en la televisión española. Después de sus trabajos en La sonata del silencio y Cuéntame cómo pasó, graba en Galicia Vivir sin permiso al lado de grandes nombres como José Coronado y Álex González.
Has sido nombrada la pregonera de estas Fiestas de Leganés 2017, ¡enhorabuena!
Gracias. Me hizo mucha ilusión cuando me lo dijeron. Ya me comentaron el año pasado que tenían intención de que fuera yo y me alegra mucho. Sobre todo porque las fiestas de Leganés siempre ha sido un momento importante en mi vida. Desde los 15 a los 19 años estuve todos los años, era el momento clave, te ibas de vacaciones todo el verano pero esos cinco días te quedabas en Madrid para disfrutarlo. Creo que ahora ya no bajo por no estropear el buen recuerdo que tengo, era tan increíble que no se puede superar (risas).
¿Nerviosa por la responsabilidad?
Sí, sobre todo por la incertidumbre de no saber muy bien qué va a pasar, cómo hacerlo… Pero muy ilusionada y agradecida.
Desde el Ayuntamiento se puso en duda que pudieras finalmente acudir…
Ahora estoy rodando Vivir sin permiso en Galicia y los planes de grabación de las series nunca son del todo fijos, siempre estás pendiente de que te confirmen pero si el calendario sigue como hasta ahora no va a haber ningún problema.
Este año pregonera, el año pasada recibiste un premio por parte de Unión por Leganés, ¿te sientes reconocida en Leganés?
Por supuesto. Me siento muy querida y cuidada por Leganés. Para mi es una ciudad muy importante porque están mis amigos, mi familia… Y siempre hace mucha ilusión que te apoyen.
Después de papeles importantes como Escobar: paraíso perdido, Cuéntame cómo pasó y La sonata del silencio te llega ahora Vivir sin permiso, ¿cómo están siendo las grabaciones?
Muy bien, devoré los guiones cuando me los mandaron. Por ahora solo hemos grabado el capítulo piloto y aún no hemos podido verlo pero tengo muchas ganas. Interpreto un personaje muy diferente a todo lo que he hecho así que para mi, profesionalmente, es todo un reto.
¿En qué sentido?
Soy la hija de Nemo, un narcotraficante importante en Galicia que lo interpreta José Coronado. Es una chica muy rebelde, con un montón de carácter, todo lo contrario a Julia (Cuéntamente cómo pasó) o a Elena (La sonata del silencio) que eran chicas dulces, inocentes, con un punto de fragilidad. Es complicado porque no lo he trabajo antes en cámara pero en mi personalidad también tengo ese punto rebelde que estoy llevando al máximo.
En todas tus producciones te rodeas de gente con mucha experiencia como José Coronado o Benicio del Toro (Escobar: Paraíso perdido), ¿cómo es trabajar con actores tan potentes?
Al final hay que relativizarlo todo, son compañeros de trabajo con los que pasas muchas horas y tienes que construir con ellos. El primer trabajo que hice fue El séptimo día con Carlos Saura, un director muy importante, que ya me impuso cuando tenía 11 años aunque fuera una cosa muy pequeña. Cuando los admiras la sensación es de mucha felicidad y de orgullo pero al final lo que gusta es poder compartir escena con actores que lo dan todo, tengan un renombre o sea su primer trabajo. El verdadero actor para mi, el que admiro, es el que lo da todo en escena.
Tus últimos papeles te ha otorgado una mayor relevancia nacional, ¿dirías que estás en un momento dulce?
Cada trabajo y cada paso que he dado ha sido un aprendizaje y un reto. He sido muy feliz haciendo teatro como La llamada o Hoy no me puedo levantar... hacer una función en el teatro con 1.600 personas ¡no hay quien lo supere! (risas). Sí que es verdad que no lo ve tanta gente como una serie en una cadena nacional pero lo que importa es la historia, el equipo detrás, el personaje y dejarte la piel en el trabajo.
¿Has visto ya la película de La llamada?
¡Sí y me encantó! Estoy orgullosa de sus directores y del reparto que hacen trabajo maravilloso. Cuando entré ya sabía que se iba a hacer una película y ha sido como ser partícipe de todo el proceso. Además, el proyecto de La llamada es muy especial porque somos una familia y a parte, lo que cuenta y transmite. Estoy feliz de haber pertenecido a él.
También te permitió hacer un personaje en Paquita Salas, ¿cómo fue volver con los Javis?
Genial. Los Javis te dan una libertad y confianza que pocas veces he visto, además Brays Efe es amigo mío y es un actor espectacular. Ojalá haya más temporadas y recuperen el personaje porque me encantaría hacer más y más de Paquita Salas.
Mucha suerte, Claudia y muchas gracias por atendernos. Nos vemos el 11 de agosto en el pregón.
¡A vosotros!