FĂTBOL. PRIMERA DIVISIĂN. JORNADA 38. El Club Deportivo LeganĂ©s pierde el Ășltimo encuentro de esta temporada por 2-1 frente a un Huesca que remontĂł el gol en propia de Mantovani con dos goles del propio argentino.
Al final del camino, nadie quiere dar paso a las despedidas. Ni un adiós. Aunque sea un hasta pronto. No importa si el desgaste de una larga temporada es motivo de un merecido descanso. Siendo sinceros, nadie quiere un final, a pesar de que nos pasemos durante nueve meses pensando en los objetivos que tienen que acompañar a esa Jornada 38.
En un abrir y cerrar de ojos, el final de LaLiga toca a la puerta. En ocasiones este punto y aparte es dramĂĄtico; pero no era el caso de la tarde del sĂĄbado. El Alcoraz era una fiesta. La fiesta del fĂștbol humilde. El que le da sentido a este planeta lleno de estrellas y sin demasiado brillo. LeganĂ©s y Huesca, equipos de Primera (que se dice pronto), cumpliendo el sueño de los que se quedan y de los que volverĂĄn.
Mucha intensidad en un inicio sin ocasiones
En busca del dominio del balĂłn, el partido comenzĂł con idas y venidas por parte de ambos conjuntos. Los pepineros se hicieron con la posesiĂłn, pero tener el esfĂ©rico no les servĂa para pasar del centro del campo, donde los oscenses presionaron alto. En un despiste de los azulgrana se colĂł Braithwaite que, tras meterse hasta la cocina, la puso al punto de penalti y, tras el rechace, Vesga disparĂł sin fortuna.
Un LeganĂ©s falto de ideas en zona de tres cuartos dominaba un partido yermo de ocasiones sobre El Alcoraz. Volviendo a los comienzos de campaña, el principal recurso pasĂł por buscar a Carrillo desde las alturas. Ăscar RodrĂguez, con esa chispa que le ha acompañado durante toda la temporada, fue el principal peligro pepinero en una primera mitad en la que Vesga estuvo muy impreciso y la delantera, desaparecida.
Mantovani adelantó al Leganés
Este subtitular podrĂa haber sido de los Ășltimos años. Pero por cosas del destino, corresponde al primer año que MartĂn Mantovani no es jugador del Club Deportivo LeganĂ©s. El central argentino, en un buen centro de Juanfran, tuvo la mala fortuna de introducir el balĂłn en la red para adelantar a los que, hace un año, eran los suyos. Las crueldades del fĂștbol.
Antes del descanso, los asistentes pudieron ver dos goles mĂĄs que no subieron al marcador. Uno por cada lado pero ambos anulados por fuera de juego. En el anulado al Huesca, Lunin parĂł el primer disparo en la Ășnica acciĂłn que tuvo en la primera mitad. Poco mĂĄs de unos cuarenta y cinco minutos con poca emociĂłn.
Mantovani, de nuevo, igualĂł el encuentro
La dinĂĄmica positiva de los blanquiazules continuĂł durante el inicio de una segunda mitad que comenzĂł accidentada. Omeruo, que sufriĂł un percance al inicio del encuentro, no pudo permanecer en el terreno de juego, dando paso a un Ezequiel Muñoz que volvĂa al cĂ©sped tras una temporada lesionado.
El fĂștbol siempre da la posibilidad de redenciĂłn y Mantovani tuvo la oportunidad de remendar su error en la segunda mitad. En una jugada a balĂłn parado, el argentino se alzĂł por encima de todos para cabecear un balĂłn fuerte que se fue al fondo de la red. Tablas en el marcador y un solo goleador.
Mantovani amargĂł el regreso de ‘Szyma’
A falta de diez minutos para el final, llegĂł el momento que muchos pepineros habĂan esperado. Tras 526 dĂas sin vestirse de corto en encuentro oficial, Alexander Szymanowski volvĂa a los terrenos de juego para disputar unos minutos antes del cierre de temporada. El regreso del ‘capitĂĄn’ se vio eclipsado por la remontada del Huesca, que se puso por delante con otro gol de Mantovani. El argentino pasĂł de villano a hĂ©roe en una segunda mitad de locos.
Tras un final movido, se cerrĂł el telĂłn. Para el Huesca, la Ășltima funciĂłn hasta, al menos, hasta agosto de 2020. El horizonte de Primera DivisiĂłn es mĂĄs cercano para el LeganĂ©s, que tendrĂĄ tres meses de descanso (con respeto a la siempre dura pretemporada) para preparar la 2019/2020. Con 46 puntos y una 13ÂȘ posiciĂłn provisional, el listĂłn estĂĄ alto. Pero este LeganĂ©s en progresiĂłn parece no haber alcanzado su techo.