Leganés, y toda la zona sur de Madrid, ha superado los niveles que se consideran ‘regulares’ de contaminación de partículas en suspensión. Expertos recomiendan reducir las actividades físicas en el exterior.
Los niveles de contaminación en Leganés han subido de forma alarmante en los últimos días. Según las mediciones de las estaciones de la Red de Calidad del Aire de la Comunidad de Madrid, los niveles de contaminación han ido en aumento desde el pasado 25 de diciembre. La falta de lluvia y el aumento del tráfico en trayectos cortos para pasar las noches en diferentes casas, han sido dos de los factores determinantes.
El gráfico de partículas en suspensión en el aire nos muestra cómo la situación está en aumento desde hace diez días cuando los niveles de partículas subieron desde lo que se considera ‘bueno’, hasta lo que los expertos destacan como ‘regular’. En Leganés, este nivel llegó al ‘malo’ el pasado 27 de diciembre, tal y como podemos apreciar en el gráfico.
Desde entonces, el nivel de contaminación del aire no se ha vuelto a recuperar y se mantiene en una concentración que empieza a ser ‘mala’ para la salud. La misma que durante el día 1 rozó los niveles que ya se considerarían muy perjudiciales para la salud humana.
Los índices, son muy similares a las ciudades de nuestro alrededor como Getafe y Alcorcón, y las estaciones de Madrid ubicadas más al sur como Méndez Álvaro y Plaza Elíptica. Todas ellas han registrado un aumento de las partículas en suspensión que roza los niveles de ‘muy malo’ en la concentración de PM 2.5 en diferentes puntos.
No obstante, cabe destacar el caso de Villaverde Alto, que registra niveles buenos en su calidad del aire ya que no mide este tipo de partículas. El mismo caso ocurre en Fuenlabrada o Móstoles cuyas estaciones solo registran las PM10.
Qué hacer para evitar la contaminación
En este contexto, los expertos recomiendan la reducción de actividades de ejercicio físico al aire libre para la población general, y la reducción de la exposición a este aire para la población de riesgo (menores de 6 años y mayores de 65, personas con enfermedades respiratorias y embarazadas). Y es que, estas partículas, debido a su pequeño tamaño, pueden penetrar hasta las partes más profundas del pulmón y pasar a la sangre, y por ello resultan especialmente nocivas.