El Balonmano Leganés saltaba a la pista a por todas para poder sumar su primera victoria. Lo hacía en casa ante el Maravillas Benalmádena y con toda la grada apoyando al conjunto local. Pero el partido no iba a ser fácil.
Desde el primer minuto, el Leganés conseguía disputar el juego y llevarse a su terreno a los malagueños los primeros 15 minutos de partido, pero rápidamente los visitantes comenzaron a llevar la delantera. Los de Ignacio Torres se adelantaban en el marcador obligando a Nacho Alcázar a pedir tiempo muerto. Las instrucciones del técnico local despertaron al conjunto de Leganés que pudo remontar el partido y terminar la primer parte iguales: 14-14.
Tras el descanso, ambos equipos se disputaban la batuta del partido manteniendo un empate constante hasta que los malagueños se separaban del marcador. Alcázar volvía a dar un toque de atención a los suyos pero no surtía el mismo efecto, y el Leganés no era capaz de remontar ante la dura defensa de los visitantes. El tiempo pasaba y viendo que se acercaba el final, los de azul cargaron pilas. Finalmente, Manuel Aranda y David Rueda hacían el milagro: empate a 29.
A dos minutos del final, Benalmádena rompía el empate. La primera victoria de la temporada estaba al alcance de los dedos pero se iba a hacer de rogar. En un golpe de 7 metros, David Santos conseguía devolver el empate al marcador y acto seguido, a 10 segundos del final, José Antonio Romero sellaba la mejor parada del partido, necesaria para mantener el marcador a 30. Posesión para el Leganés. En su ataque, el árbitro pitaba un libre directo justo con el tiempo cumplido que Santos estrellaba contra la barrera. 30-30.




