Y que sigue sin poder ser. El Balonmano Leganés lo ha dado todo en la pista del Manuel Cadenas este sábado ante un duro Bolaños al que le plantó cara estando a segundos de firmar una victoria contra uno de los grandes de esta temporada. Sin embargo, el apretón de los últimos dos minutos de los de Ciudad Real les hizo remontar y conseguir un empate que agrió el estreno de Álvaro Rodríguez como entrenador pepinero.
En los diez primeros minutos del partido ya pudimos tener un adelanto de lo que nos esperaba en el Manuel Cadenas: sufrir. El Leganés despertaba desde los primeros compases para plantar cara a un Bolaños que salía fuerte. En el minuto 8 llegaba el primer empate del partido (5-5) pero los de Ciudad Real se alejaban en el marcador.
El impulso de los visitantes no duró mucho. A los pocos minutos el Leganés conseguía empatar y un tiro directo de David Santos tras una falta les ponía por delante en el marcador (11-10). Ahí comenzaba una intensidad en la que las defensas hacían su gran labor no dejando que se movieran los marcadores en más de diez minutos. Hasta que el Leganés se imponía.
El Leganés se impone
Pero de nuevo la diferencia duraba poco y el Bolaños conseguía remontar para empatar (14-14). La intensidad y la rapidez del juego en la pista, y la fuerza de las defensas hacía que el marcador pareciera un acordeón. Pero el Leganés cogía las riendas para terminar la primera parte por delante (16-14).
En la segunda parte, el Balonmano Leganés comenzaba imponiéndose sin grietas. Imprimiendo más intensidad al juego conseguían marcar a placer despegándose en el marcador (21-18). Pero el Bolaños no frenaba. Y la intensidad aumentaba. Y el Leganés seguía marcando mientras los visitantes no se despegaban (23-20).
Así se llegaban a los últimos siete minutos, con un 25-22 en el marcador. El Leganés tenía que aguantar. Frenar las embestidas del Bolaños que no paraba de aproximarse a la portería. Pero no era capaz. Los de Ciudad Real aprovechaban el cansancio para crecerse. En tan solo tres minutos, cuatro goles (27-24). Quedaban dos minutos. Había que aguantar.
El Bolaños aprovecha los últimos segundos
Pero el Bolaños conseguía encontrar un hueco en la defensa del Leganés recortando distancias. Los del Lega tenían claro que había que dejar pasar el tiempo. Aprovechaba para mantener la posesión del balón basculando en el mediocampo, y un robo rápido terminaba con un paradón del Leganés. Lo mismo que el siguiente contraataque. Pero el árbitro pitaba falta y el Bolaños lanzaba un tiro directo que sí que entraba (27-26).
Un minuto. El Leganés tenía la posesión. Quedaban aún 30 segundos cuando Roberto Boada intentaba un lanzamiento que acabó en las manos del portero comenzando un rápido contraataque que el Bolaños aprovechó. Gol a falta de 15 segundos. Amargo empate a 27 y final de partido.
Así el Leganés terminó orgulloso un duro partido contra el tercer clasificado viendo lo bien que le ha sentado el descanso navideño y cambio de entrenador. Arañando un punto inesperado y esperando que esta buena forma se note también la próxima semana en Algeciras, rival directo en la tabla.