El proceso de renovación de Metro de Madrid sigue adelante. Además de la construcción de nuevos kilómetros de túnel y la renovación de la estación de El Casar, la Comunidad de Madrid ha estrenado esta semana los nuevos tornos inteligentes en Cuatro Caminos y Reyes Católicos.
Estos aparatos ocupan menos espacio, agilizan los accesos y disponen de un diseño más intuitivo y una pantalla que informa al viajero sobre la admisión del título de transporte empleando gráficos y texto. Además, introducen avisos acústicos y de iluminación led en las puertas y en el suelo, para informar sobre el resultado de la validación.
Asimismo, incorporan la tecnología más moderna disponible en la actualidad para estos sistemas, que, aunque invisible de cara al usuario, es muy útil en la gestión y el mantenimiento de los equipos. Otra de las novedades es que, estos modelos, permitirán, en un futuro próximo, el pago del billete con tarjeta bancaria.
Más de veinte tornos inteligentes
Estas dos nuevas estaciones se suman a los 17 ya ubicados en Gran Vía como parte de un proyecto que se extenderá, en una primera fase, hasta 2025, y que supone la colocación de estos dispositivos en 32 infraestructuras de la red.
En total, se han colocado 22 tornos, 13 en Cuatro Caminos y 9 en Reyes Católicos. En la primera, cinco se encuentran en el acceso por la calle Maudes y ocho en el vestíbulo principal, siendo cuatro de ellos adaptados a personas con movilidad reducida.
En estos dos próximos años, está prevista su instalación en 32 estaciones, para lo que el Gobierno regional invertirá 16 millones de euros, incluyendo el montaje de 387 accesos inteligentes en Manuel de Falla, Alonso de Mendoza, Juan de la Cierva, Getafe Central, Casa del Reloj, Hospital Severo Ochoa, Menéndez Pelayo y Tres Olivos. También, en Begoña, Avenida de América, Atocha, Ventas, Duque de Pastrana, Santiago Bernabéu y Diego de León, entre otras.
Después, en una segunda fase, que finalizará en 2029, se prevé llegar a otras 154 estaciones, lo que representa la mitad de la red. Este proyecto se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea-Next Generation EU.