El primer equipo femenino del Club Balonmano Leganés no pudo celebrar la que sería su segunda victoria consecutiva. En el Pabellón Municipal Manuel Cadenas se jugó este sábado una oportunidad de oro: un duelo directo entre el Leganés y el Oliveira & Faro Seaplast Cañiza. Las de Chapy tenían la oportunidad de escalar en la tabla, pero no pudo ser.
Desde el primer momento, el ambiente del Manuel Cadenas detectaba lo importante de este encuentro. Las dos aficiones conocían de la necesidad de la victoria para su respectivo equipo. Y las jugadoras también. La intensidad estaba servida desde el minuto uno lo que hizo que antes del primer gol llegara la primera amonestación.
Irene Torres fue la primera en anotar para el Leganés aunque las gallegas no tardaron en empatar y, en una racha de apenas dos minutos, abrir un hueco en el marcador colocándose por delante. Torres y María Lucero conseguían seguir sumando pero Carla Rodríguez se convertía en un quebradero de cabeza para las pepineras. Su brazo marcaba el 5-10 en el primer cuarto de hora.
Aunque la intensidad de las de Leganés no bajaba, una nueva racha goleadora de las gallegas abría de nuevo la distancia. Las de Pontevedra se marchaban, y el Leganés, a remolque, no conseguía pillarlas. Llegaba el descanso con un 14-19 en el marcador.
A la vuelta de vestuarios, el Leganés era consciente de que el resultado era remontable. Solo cinco tantos las separaban de las gallegas. Por eso salieron a darlo todo y Oana Sabella marcaba para las pepineras en los primeros segundos volviendo a hacerlo apenas unos minutos después. Pero las de Pontevedra seguían con su racha goleadora.
Había pasado un cuarto de hora cuando las de Leganés comenzaron a abrir más huecos en la defensa gallega. Irene Torres, Haizea García y María Lucero conseguían marcar y el míster de Cañiza pedía tiempo muerto. Parón que las de Chapy aprovechaban para reconstruir la táctica que las permitía seguir llegando a portería. Apenas un minuto después Paula Jeréz y Noelia García recortaban distancias. 24-26. Dos minutos para el final.
La intensidad aumentaba en la pista y aunque el Leganés tenía oportunidades, no podía con la defensa gallega. Un duelo en el que el tiempo corría en contra de las pepineras. Con toda la afición aupándolas, las de Chapy buscaban al menos el empate pero las de Pontevedra ahogaban los sueños del Leganés. 25-28.