El Innova-tsn Leganés de Javier Fort está imparable. En su última jornada de 2024 fuera de casa, en Zamora, el primer equipo del Club Baloncesto Leganés ha demostrado que no pierde la forma, ni el fondo. En palabras del míster, «las derrotas llegarán», pero está visto que no van a permitir que lo hagan pronto.
Manteniendo su dinámica de rotación contante, Javier Fort consiguió exprimir al máximo a las jugadoras. Pero sobre todo a Cristina Soriano. En los 28 minutos que estuvo en la cancha, consiguió marcar 21 puntos que fueron vitales para el Leganés, convirtiéndose en la máxima anotadora del partido. Seguida estuvo Lahuerta con 16 puntos.
El partido arrancó con un mano a mano entre el Leganés y el Zamora, que plantó cara a las pepineras desde el primer minuto. Sellaron un primer parcial de 13-18 pero en el segundo tiempo, las de Leganés se hicieron fuertes y se convirtieron en un muro para las locales. A las de Zamora no les entraba nada, mientras que Soriano y Bermejo comenzaron mano a mano en el aro. Con triples de Lahuerta primero y María Espín al final, el marcador se iba a un 19-36.
Las de Zamora se vieron obligadas a despertar y el descanso las ayudó. Las jugadoras empezaron a medir bien a sus rivales y a reconciliarse con la canasta. Uno tras otro iban sumando pero sin poder recortar puntos. Y es que las de Javier Fort tampoco perdonaban.
Aunque el parcial se ajustaba al máximo, las de Leganés vivían holgadas de las rentas del segundo tiempo y podían irse al final con un 40-61 en el luminoso. Una señal de que el partido estaba yendo por el camino de la victoria aunque con más sufrimiento del esperado. 40-61.
Esto se veía reflejado en los dos primeros minutos del último tiempo. Zamora se compenetraba y conseguía encadenar canastas y triples mientras que los tiros del Leganés no entraban, llegando al 48-63. Pero la intervención de Javier Fort con un tiempo muerto hacía despertar de nuevo a las pepineras.
Lahuerta volvía al juego anotando y aunque el tapón no se descongestionaba, las pepineras defendían mucho mejor a las zamoranas. Aprovechando la intensidad en la defensa, el Zamora forzaba las faltas personales y conseguía ir sumando de a poco. Una canasta de Togores descongestionaba al Leganés a casi dos minutos del final. 61-69.
Las faltas se siguieron sucediendo y con el aliento del Zamora ya en la nuca, el Leganés no podía bajar la guardia. Y así lo hizo. Manteniéndose alerta mantuvieron las rentas de un espléndido segundo cuarto dejando el marcador final en un 64-74.