Un hombre falleció en julio de 2020 después de ser arrollado cuando intentaba cruzar la M40 andando. Se encontraba en el desvío de acceso al barrio de La Fortuna. La víctima cruzaba a pie por mitad de la calzada los cuatro carriles de la autovía. El conductor ha sido condenado considerando que es responsable en un 25% del atropello mortal.
En un primer momento, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Madrid había condenado íntegramente a la víctima. Pero en una instancia superior, tras el recurso de la familia, también fue condenado el conductor, tal y como informan Toro Abogados a la Cadena SER.
Según revelan desde el despacho de abogados, el recurso se basó en la ‘teoría de la culpa exclusiva de la víctima’. Esto significa que «el conductor debe haber respetado todas las normas de tráfico para ser eximido totalmente de responsabilidad en el atropello». Un teoría que cada vez está más extendida en caso de atropellos similares al que ocurriera en 2020.
En este caso, el vehículo que arrolló a la víctima cumplía todas las normas de tráfico a excepción de la distancia de seguridad. Esto hizo que, tras ver que el vehículo de delante frenaba, tuviera que dar un volantazo para evitar colisionar, cambiando bruscamente su trayectoria y encontrándose con el peatón.
«Si hubiera circulado más alejado hubiera podido ver y comprender la razón por la que el vehículo que iba delante frenaba, y haber evitado el atropello, o, al menos, haber reducido sus devastadores efectos en la persona del peatón”, recoge la sentencia.
