Fundación Esfera organiza nuevamente un Halloween misterioso e inclusivo, con la celebración del Gran Dark Circus. La propuesta se dirige a personas de todas las edades y tendrá lugar el 31 de octubre, en la explanada de Av. de los Pinos 6 de Leganés, con pase infantil de 17:30h a 19:30 horas, y sesión para adultos entre las 20:00 y las 22:00 horas.
Se trata de un evento que cada año adquiere mayor importancia en la localidad, en el que participan usuarios y profesionales de la entidad. El trabajo comienza con la creación de una historia que marca la temática, y continúa con elaboración de la decoración, caracterización de personajes, ensayo de actuaciones y organización del espectáculo.
El público conocerá el Gran Dark Circus, la oscura compañía circense que visitó la ciudad en el siglo XIX. Los vecinos descubrieron que eran peligrosos y si alguno intentaba descubrir su historia el infortunio caía sobre él y lo perdía todo. El alcalde decidió encerrarles de por vida en unos establos abandonados, bajo pena de muerte para aquellos que intentaran acceder. No volvió a hablarse de este episodio, pero sus protagonistas han recobrado vida para vengarse.
El espectáculo se dividirá en dos espacios: pasaje del terror y escenario exterior con animaciones, juegos, personajes misteriosos, zona de tatuajes, photocall y puestos de comida. Los participantes podrán implicarse en el Taller malabacirco y probar perritos calientes, palomitas, refrescos y gominolas.
La alta participación del año pasado en el pasaje del terror, superando las 300 personas, ha implicado delimitar el aforo, de forma que los participantes disfruten de cada pase con el tiempo previsto de duración. Los interesados tendrán que adquirir su entrada de forma anticipada en Administración de Fundación Esfera (Av. de los Pinos 16, Leganés) en horario de 9:00 a 18:30 horas. El donativo de 3,50€ se destinará a financiar los programas inclusivos.
El objetivo principal, como en todos los proyectos que Esfera desarrolla, es promover la inclusión de las personas con diversidad funcional. Esto se consigue con la implicación de los usuarios en la preparación del evento, y con las ganas del público por disfrutar, sin importar la discapacidad. Los espectadores ponen su atención en la calidad del resultado final y en la actitud acogedora de los organizadores.