Las temperaturas han aumentado en los últimos días. Este 16 de marzo hemos vivido uno de los días más calurosos en lo que llevamos de año con temperaturas de 25 grados lo que a muchos nos ha hecho pensar en el verano. Si las temperaturas son así y aún es invierno, ¿cuál será la máxima este año?
Esto mismo también se han preguntado las familias de la Escuela Infantil El Koala ubicada en Leganés Norte que ha denunciado en varias ocasiones las altas temperaturas que han registrado en el centro. La escuela, inaugurada hace once años, tiene un diseño circular basado en potenciar la luz natural por lo que hay un gran número de cristaleras hacia un exterior sin árboles, pero no hay aire acondicionado.
«La escuela tiene una ubicación y diseño perfecto para el invierno, los bebés no pasan nada de frío. Pero por el mismo motivo en verano es una sauna», aseguran Cristina y Natalia, madres de dos bebés de la escuela. Por esta misma razón han presentado varias solicitudes al Ayuntamiento de Leganés para que se instale un aire acondicionado en las aulas sin que aún haya sido atendida su petición.
Cuatro meses de solicitudes y firmas
«Estamos en marzo y creemos que aún hay tiempo para instalarlo de cara al verano», explicaba las familias que llevan movilizándose desde noviembre ante la previsible nueva ola de calor este verano. En este tiempo han organizado tres recogidas de firmas, a las que se han adherido más de 80 familias, y enviado al Ayuntamiento sin por ahora respuesta.
«El año pasado se registraron 38 grados en las aulas, ni los bebés ni las trabajadoras deberían soportar ese calor», subrayaba Natalia quien recuerda que para paliar el calor el Ayuntamiento cedió dos pingüinos sin tener en cuenta que la escuela consta de ocho aulas. «Las profesoras hacen lo imposible para tenerlos a gusto: hacen muchas actividades con agua, les pulverizan cada poco tiempo… pero es imposible».
Durante este tiempo de reclamaciones, las familias se han visto una vez con la coordinadora de escuelas infantiles sin que se les haya facilitado ninguna solución. Lo más llamativo es que, tal y como se les ha comentado a las familias, existe un proyecto para mejorar la climatización de las escuelas infantiles aunque no se conocen los plazos en los que se pueda llevar a cabo.
Con esta situación, reconocen que les «da mucho cargo de conciencia dejarles allí en verano con el calor que hace pero no es que podamos elegir. Les dejamos para poder conciliar y trabajar, y no tenemos otra opción». Ante ello, las familias están seguras en su intención de continuar pidiendo este aire acondicionado, que sí existe en otras escuelas infantiles, ya que ven que es esencial para el bienestar de sus bebés y los trabajadores ante la previsión de calor.