La falta de personal y previsión en el Ayuntamiento de Leganés ha vuelto a causar graves problemas, esta vez, paralizando la concejalía de Servicios Sociales. En estos momentos hay 60 personas mano sobre mano queriendo trabajar pero sin poder hacerlo, lo que está desesperando a los propios trabajadores ya que llevan así desde
Todo ha comenzado en el momento en el que la Jefa de Negociado de Servicios Sociales ha pedido una excedencia. Entre sus labores está firmar todos los documentos que salen de la concejalía, entre ellos, ayudas e informes. Sin esta persona, es como si no se trabajara. Y no sólo eso, sino que ahora mismo está en peligro el convenio con Cáritas y decenas de puestos de trabajo de la empresa ‘Sanivida’ que ofrece la asistencia a domicilio a los vecinos de Leganés. «La Comunidad de Madrid se ha hecho responsable de usuarios de dependencia 2 y 3, lo hace siempre antes de elecciones, ahora los trabajadores que tenían asignados esos usuarios hay que reorganizarlos a gente en lista de espera, pero no podemos porque no hay quien firme el decreto, y ante la falta de trabajo puede haber despidos», nos confiesan desde la concejalía.
La administración de Leganés exige que la Jefatura de Sección debe de recaer en una funcionara y en el concejalía en estos momentos no hay puesto que hasta ahora no era así. «Durante diez años la persona que firmaba era personal laboral porque se dijo que era una solución temporal hasta que contratara a un funcionario, y no se ha hecho, tanto Intervención como la Oficina de Apoyo a la Junta de Gobierno Local ahora no levantan la mano», nos confirman a LEGANÉS ACTIVO.
En estos momentos no hay maniobra posible para ocupar este puesto por una funcionaria y, según apuntan fuentes de la concejalía y sindicatos, una convocatoria de esta plaza podría durar entre 6 meses y 2 años.
Ante este tapón burocrático, una funcionaria ha sido reasignada al puesto desde otra área, pero no es una solución a largo plazo. «Las concejalías tienen dos áreas: técnica y administrativa, y nos faltan firma en las dos. Esto es sólo un parche y tampoco sabemos si va a funcionar«. Todo esto ha llevado al límite a los trabajadores que comienzan a pensar en movilizaciones.