El futuro del Centro de Atención a Personas con Discapacidad Física (CAMF) de Leganés volvió a la Asamblea de Madrid esta semana en un debate sobre su posible traspaso a la Comunidad de Madrid. El centro depende actualmente del Imserso y del Gobierno central, pero el Ejecutivo autonómico está a la espera de una reunión para decidir si asume su gestión.
El Gobierno central ofrece el CAMF
La diputada socialista Ana Prados preguntó al Gobierno regional por su postura ante el ofrecimiento del Ejecutivo central para transferir la gestión tanto del CAMF de Leganés como del Centro de Recuperación de Personas con Discapacidad (CRMF) de Puente de Vallecas.
Prados defendió el valor de estos espacios:
“Centros que no son un complemento, que no son un adorno; son una pieza imprescindible del Estado del bienestar”, subrayó.
La parlamentaria reclamó que se garantice su gestión pública, sin cesiones a entidades privadas, y destacó que representan “espacios de vida, de recuperación, de inclusión y de dignidad”.
A la espera de una reunión
La directora general de Atención a Personas con Discapacidad, Alejandra Serrano (PP), contestó que el Gobierno regional lleva tres meses esperando una reunión con el Imserso, el Ministerio de Hacienda y el de Política Territorial para conocer las condiciones concretas del traspaso.
“Nos ofrecieron estos centros al igual que al resto de comunidades autónomas, pero todavía no se ha concretado nada. Cuando tengamos la información, podremos tomar una decisión definitiva y beneficiosa para las personas con discapacidad”, afirmó Serrano.
La responsable autonómica aseguró que ambos centros “están bien conservados” y que la Comunidad de Madrid comparte con el PSOE “la importancia de preservar los derechos de las personas con discapacidad”. Sin embargo, criticó que el Gobierno central “quiera desprenderse de unos centros tan importantes” sin aclarar las condiciones.
Relevancia local
El CAMF de Leganés ofrece atención residencial y de rehabilitación a personas con discapacidad física. Su futuro está pendiente de la negociación entre ambas administraciones. Si la Comunidad de Madrid acepta el traspaso, el centro pasaría a depender del Ejecutivo autonómico, aunque de momento no hay calendario para la decisión definitiva.