El Ayuntamiento de Leganés mantiene la política de control de plagas sostenible. A través de insectos, colocados en casetas en las copas de los árboles, se busca controlar y prevenir plagas como la galeruca, que afecta ya a centenares de árboles.
La Concejalía de Medio Ambiente ha colocado doce casetas de madera, con diseño de panel de abeja, repartidas por los parques y jardines del municipio con el objetivo de controlar la presencia de insectos y prevenir la aparición de plagas. Las ubicaciones seleccionadas para este proyecto han sido las siguientes: Parque de Los Frailes (tres unidades), Avenida Carmen Amaya (dos unidades), Parque del Oeste (una), Parque de la Morera (una), Parque de los Cipreses (una), Parque Lineal en Arroyo Culebro (una), Jardines de García Lorca en La Fortuna (una) y CPA de la Calle Chile (una).
“Estos hoteles van a facilitar el fomento de la biodiversidad, van a mejorar la polinización y a favorecer un mejor control biológico de las plagas. Además suponen un valor educativo y de concienciación tanto para niños como para adultos, ya que contribuyen a la sostenibilidad urbana”.
concejala de Medio Ambiente, Violeta Bonet (PP)
Mejorar el medioambiente sin químicos
Estos hoteles aportarán cinco beneficios esenciales:
- Fomentar la biodiversidad al ofrecer refugios especializados para distintas especies de insectos, como avispas y abejas
- Ayudar a la restauración de los hábitats naturales
- Mejorar la polinización y calidad de los espacios verdes
- Facilitar el control biológico de las plagas y reducir el uso de pesticidas dañinos para el ecosistema y la salud de los vecinos
- Aportar valor educativo y concienciación sobre la importancia de los insectos en la naturaleza, contribuyendo así a la sostenibilidad urbana.
Quinta campaña de control con insectos
Utilizar el ciclo de la naturaleza a nuestro favor es una de las máximas para controlar y mantener el medioambiente. Y en Leganés no es la primera vez que se hace. Ya en 2020 se anunció la colocación de cerca de 200.000 insectos beneficiosos que permitirán realizar un control biológico de plagas en 800 árboles de la ciudad (Robinias, Sophoras, Catalpas, Olmos y Arces).
«Este método, aunque ecológico y natural, es más lento que los tratamientos químicos pero más eficaz en el tiempo. Al ser insectos autóctonos permanecen en el árbol por lo que una vez restaurado el equilibrio su efecto perdura», señalaban los técnicos.
Colaboración público-privada
En esta ocasión, el Gobierno de Leganés (PP y ULEG) ha apostado nuevamente por la colaboración de una empresa privada, Lokímica-Rentokil, experta en control de plagas.