Blanca Poza, aficionada del Club Deportivo Leganés y conocida desde su emocionante historia en enero del presente año, visitó a los jugadores del equipo en uno de los mejores momentos de la temporada. Blanca, con 56 años, lucha contra el cáncer y desde enero cuenta con la mejor plantilla para ganar este partido.
Desde su primera sesión, justo el día después de que el Lega eliminara al Madrid de Copa del Rey en el Santiago Bernabéu, se ha convertido en un nombre importante dentro de la lucha contra el cáncer de mama. Aquellos días de enero decía con fuerza que «si el Leganés había ganado al Real Madrid, ella podía ganar este partido». Tres meses después, ha habido más sesiones. Desde la primera, ya tenía comprados los pañuelos. Hoy los luce con coraje y confianza.
Como agradecimiento al equipo, quiso dirigirse a ellos para trasladarles con una carta lo que han sido capaces de hacer en su historia, en su lucha. Blanca, su hija, se puso en contacto con Daniel Abanda, responsable de comunicación, para que todo fuera posible. Pero el mérito radica en su madre, explicaba Blanca, ya que la carta está escrita por su madre, es de su puño y letra.
“Una fuerza desconocida se instaló en mi corazón”
?Tu equipo está contigo Blanca. Un honor haberos recibido a ti y a tu hija @BlankFernandez esta mañana en Butarque. Eres un ejemplo de vida. Juntos lo vamos a conseguir. #APorElBicho ? pic.twitter.com/eb2bB6h2U7
— C.D. Leganés (@CDLeganes) May 10, 2018
En un vídeo publicado por la cuenta oficial del equipo, se ve a Blanca leyendo la carta para toda la plantilla, atenta con la historia. Allí contaba el momento en el que cambió todo. “Mi hijo estaba en su casa, y mi hija y mi marido se habían ido al Bernabéu a ver jugar a nuestro equipo contra el Real Madrid. Y allí estaba yo, que no soy futbolera, siguiendo emocionada a otro David contra otro Goliat”. A partir de aquella hazaña para Leganés, ella tuvo claro que la motivación estaba en una camiseta, una bufanda, un pañuelo. Siempre prendas del Lega, su Lega.
Al final del vídeo, todos los jugadores del equipo se pusieron el pañuelo para demostrarle que no está sola. Pero Blanca, como nos decía su hija para Leganés Activo, está contenta con sus pañuelos. Y no tiene problema en quitárselos y hacer uso de su humor, comparándose con Amrabat entre risas. Una verdadera lucha que ya forma parte de la historia del Leganés.