Carlos Delgado ha pedido a CEIM la expulsión de Francisco Alcaína por amenazarle de muerte. Una jueza ha considerado probadas las amenazas denunciadas por el portavoz de ULEG. También solicita la expulsión de Augusto Fuentes por «amparar» este comportamiento.
La semana pasada conocíamos la condena de Francisco Alcaína, vicepresidente de UNELE, por amenazar a un concejal del Ayuntamiento. El juzgado consideraba probado que el empresario increpó al edil y portavoz de ULEG, Carlos Delgado, amenazándole de muerte, condenándole a una multa y el pago de las costas del juicio.
Este ha sido el motivo por el que el propio amenazado ha solicitado la expulsión de Alcaína de la Unión de Empresarios de Leganés (UNELE). «No se pueden tolerar acciones mafiosas y delincuentes de directivos de la patronal para amedrentar a ediles que luchan contra la corrupción. Se exigen medidas inmediatas», ha escrito en su cuenta de Twitter, donde ha adjuntado la carta oficial que ha remitido a CEIM, órgano del que depende UNELE, para solicitar la expulsión.
En la misiva, dirigida al presidente de la Confederación Empresarial de Madrid, Juan Pablo Lázaro, se advierte que los hechos ocurrieron tras una denuncia del partido ULEG sobre «las irregularidades cometidas por UNELE en la inauguración del congreso ‘People & Bussiness'». Según denunció la formación, la Unión de Empresarios presentó facturas fuera de plazo con conceptos falsos para justificar una subvención. La denuncia pública, asegura Delgado, motivó al empresario a acercarse e «intentar amedrentar» al portavoz «amenazándole e insultándolo».
Ahora, el juzgado ha condenado al vicepresidente por considerar probadas estas amenazas por lo que Carlos Delgado solicita «acciones inmediatas». Así, ha pedido a CEIM que se le lleve a cabo un expediente disciplinario de expulsión «ante comportamientos claramente mafiosos»; así como el inmediato cese de Augusto Fuentes, presidente de UNELE y vicepresidente de CEIM, «que ampara y proteger estos comportamientos».
La carta, por ahora, no ha recibido respuesta, aunque no es la primera misiva que recibe la Confederación madrileña en contra de los comportamientos de UNELE. El pasado mes de febrero, un ex miembro de la Junta Directiva de la unión empresarial enviaba un burofax a la organización anunciando su dimisión por «los escándalos e irregularidades protagonizados por la gestión al frente de la misma del presidente Augusto Fuentes».