Centenares de personas han salido a la calle contra el amianto en el CEIP Luis de Góngora. Reclaman a la Comunidad que lo retiren inmediatamente ya que se trata de un material cancerígeno.
Centenares de familias se han unido esta mañana reclamando mejoras en el CEIP Luis de Góngora de Leganés. Desde el pasado mes de julio, las familias se han comenzado a movilizar al descubrir que su centro, a pesar de contener amianto en la construcción y goteras en varios de los edificios que lo componen, no va a ser rehabilitado.
«Estamos aquí porque no vamos a parar», asegura una de las madres, miembro del AMPA del centro, que ha ayudado en la organización de la convocatoria. Las familias han recorrido los kilómetros que separan el CEIP Luis de Góngora de la Dirección de Área Territorial Sur, el centro donde se encuentran los responsables de Educación de la Comunidad de Madrid.
«Queremos respirar para estudiar».
Una de las consignas más repetidas
Padres, madres, abuelas, niños y niñas han acudido a la cita para reclamar un espacio sin amianto en el colegio. «Los niños son lo más importante. Tienen que retirar el amianto pero ya. No hay derecho que los niños estén ahí sin poder hacer gimnasia ni nada», reclamaba una de las abuelas que ha acudido a la manifestación.
El plantón de Manuel Bautista
A su llegada a la DAT, parte de los centenares de personas entraron en el hall del edificio para reclamar una reunión urgente con el responsable del área, Manuel Bautista. Sin embargo,el responsable no se encontraba en esos momentos. «En media hora volverá de una reunión para recibirnos», explicaba una de las madres del AMPA al resto de los manifestantes. Pero esa media hora se convirtió en un no final.
Y es que, la Comunidad es quien tiene que mover ficha primero. «El Ayuntamiento se ha comprometido a hacer el arreglo del gimnasio y el centro que les corresponde, que es cubrir los agujeros del techo; pero si la cubierta está rota seguirá habiendo goteras, y eso es cosa de la Comunidad», explican desde el AMPA.
De esta forma, el AMPA lamenta que las promesas de la Comunidad nunca se convierten en realidad y que tendrán que seguir en la lucha. Así, consideran que volverán a la calle para inundarlas nuevamente de reclamaciones.