Borja Niso dejó su vida de ingeniero informático para dedicarse al piano en cuerpo y alma hace cuatro año. Ahora llena conciertos en todos los puntos de España y espera su oportunidad en Leganés.
Con tan solo 4 años de instrumento, el pianista Borja Niso ha llenado teatros en sus dos últimas giras nacionales. Un hito que sus compañeros de profesional califican de «único» y es que no hay registros de ninguna otra persona que, tras únicamente dos años tocando, ya se pusiera al frente de un gran público para brindar un concierto de dos horas completamente en solitario.
«Normalmente hay que trabajar hasta diez años para poder aprenderte un concierto de dos horas y hacerlo con soltura ante el gran público», nos explica el pianista e ingeniero informático, y es que, Borja tenía 35 años y «la vida resuelta» cuando Ludovico Einaudi le cambió la vida. Tras escuchar ‘Nouvole Bianci’, se puso frente a un piano para sacar el tema de oído, algo que consiguió en apenas unas semanas.
No habían pasado ni 3 semanas cuando me di cuenta de que no sólo había conseguido tocar esa preciosa pieza, con cierta dignidad, sino que también había compuesto uno de mis primeros temas y más apreciados por el público, al que llamé “La Tormenta Perfecta”.
Este primer hito abrió un mundo ante los ojos de Niso que, sin pensárselo dos veces, se dio cuenta de que la vida que quería pasaba por estar frente a un piano, y no a un ordenador. En ese momento comenzó a dedicarle cada vez más tiempo a su formación musical hasta que dejó su trabajo para dedicarse en cuerpo y alma a la música. «Mi familia al principio no lo entendió pero era lo que me hacía feliz», asegura Borja Niso.
La espina de Leganés
Ahora, dos años después de haber girado 180º el rumbo de su vida, el de Leganés ha conseguido desmarcarse y convertirse en uno de los grandes pianistas del momento llenando teatros. «En estos meses con el COVID he cancelado 46 conciertos» pero ninguno de ellos en Leganés, algo que le «da rabia» al haber vivido 35 años en la ciudad. Mientras tanto, ha llenado conciertos en todos los puntos de la geografía española, y este 11 de julio tocará en el homenaje a las víctimas del COVID organizado en Pinto.
«Me haría mucha ilusión porque soy de Leganés y conozco a miles de personas, mi familia sigue allí», confiesa Borja quien se ha mudado a causa de su actual trabajo, «por eso he perseguido al Ayuntamiento en los últimos tres años para presentarme y ofrecer mis conciertos pero no he recibido respuesta». La última propuesta ha sido para esta edición de Las Lunas del Egaleo, donde toca su ‘competidor’, Strad el violinista rebelde, cuyo público es muy similar al que acude a ver a Borja Niso.
Además, se da la circunstancia de que en este año la concejalía de cultura ha destacado su intención de promocionar el talento pepinero, lo que llama la atención al pianista. «He escrito a los técnicos de la delegación y no me han respondido ningún e-mail. Escribí cuando había hueco y luego me enteré que estaba todo lleno. Es una lástima». No obstante, confía en que esta dinámica negativa cambien en algún momento y pueda tocar ante su ciudad.