El Ayuntamiento de Madrid da luz verde a la pasarela que conectará ambos barrios sobre las vías del tren. El proyecto está planteado para una duración de nueve meses.
Inmaculada Sanz, portavoz del Gobierno municipal de Madrid, detalló en rueda de prensa cómo será la infraestructura de la nueva obra ejecutada por el área de Obras y Equipamientos. Una actuación que, después de una larga demanda, se ha llevado a cabo.
La construcción de esta pasarela pretende ser beneficiosa para los vecinos de ambos barrios que, actualmente divididos por las vías férreas de la línea C-3 de cercanías, contarán, además de su conexión peatonal, con la ventaja de poder acceder a la estación de renfe de San Cristóbal.
Este puente está formado por 170 metros de longitud de estructura metálica de gran diseño. Contará con un ancho de 3,5 metros y estará apoyado sobre grandes pilares de hormigón armado. Las entradas, situadas en ambas extremidades de la pasarela, serán completamente accesibles compuestas por sendas rampas. En la parte de Butarque, la entrada se situará en la calle Hulla y, en el de San Cristóbal, en la calle Paterna.
Por otro lado, en la boca de San Cristóbal habrá unas escaleras que sirvan de atajo como alternativa de movilidad.
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La obra tiene un presupuesto de 3,8 millones de euros y se realizará en un periodo previsto para 9 meses. Una vez finalizada la actuación, se pretende ajardinar la parte de las entradas. Con ello, el Ayuntamiento de Madrid pretende incrementar su compromiso con el reequilibrio y la cohesión territorial, ya que mejorará notablemente la accesibilidad del barrio de Butarque al transporte público de renfe, del cual, actualmente carece.
