La empresa navarra fue víctima de un fraude a través de una técnica de phissing. Los detenidos están a disposición judicial.
Tres jóvenes de entre 22 y 24 años han sido detenidos por la Guardia Civil. Son sospechosos de haber estafado a una empresa automovilística de Navarra. Los tres residentes de Leganés han sido acusados de un delito de estafa, un delito de usurpación del estado civil y un delito de blanqueo de capitales.
La operación de la Guardia Civil, denominada ‘Strarling’, comenzaba por una denuncia interpuesta por una empresa de automoción de Pamplona. Una representante de la entidad declaró haber sido estafada: uno de sus proveedores se había puesto en contacto con ella tras no haber recibido un pago que se había girado.
A raíz de la denuncia, los agentes encargados de la investigación comenzaron a comprobar lo que había ocurrido. Según ha podido saberse, el modus operandi consistía en acceder telemáticamente a los e-mails de la empresa con sus proveedores. Con ello podían acceder a información delicada para poder hacerse pasar por los proveedores.
Los delincuentes, tras ello, se hacían pasar por los proveedores a través de una técnica de phissing para comunicarse con la empresa. Así les informaba de un cambio en los números de cuentas bancarias a los que tenían que hacer los pagos. De esta forma, se aseguraban que la transferencia llegara a su cuenta de forma ‘sencilla’.
El rastreo de los delincuentes fue complicado. Y es que estas cuentas bancarias fueron dadas de alta en bancas online a través de números de teléfono prepago adquiridos con documentación falsa. No obstante, los tres jóvenes residentes en Leganés han sido identificados y puestos a disposición judicial.
