Eran las 4 de la mañana del 15 de enero cuando un gran estruendo resonaba en la plaza Holanda del barrio de El Carrascal. Varios golpes secos resonaban: un varón de mediana edad se encontraba reventando el cristal de un bar con la tapa de una alcantarilla que soltó de los alrededores. Testigos aseguran que un hombre que paseaba en ese momento por la zona le increpó para que desistiera pero el ladrón no hizo caso.
Según se puede ver en las imágenes de seguridad, el hombre, de complexión delgada, iba camuflado con un pasamontañas y guantes lo que ha impedido su identificación. Tras romper el cristal de la ventana del bar, se introdujo en el interior saltando por encima de las sillas y mesas de terraza que el personal agolpa en la pared.
«Apenas estuvo dos minutos en el interior pero reventó una máquina tragaperras», ha narrado para Leganés Activo el dueño del bar. En las imágenes se puede apreciar cómo la agarra y la arrastra hasta el medio del bar donde la tira al suelo para romperla: «en cuanto cae se parte en dos, coge todo lo que hay y se va en un patinete». «Solo cambiar el cristal que han roto se sube de los mil euros», asegura el dueño.
A pesar de contar con otras máquinas en el local, el ladrón salió corriendo rápidamente y desapareció en su patineta antes de que llegara la Policía Local, «lo tenía calculado», aprecian desde el bar. No obstante, destacan que «es muy raro que roben en la madrugada de un sábado al domingo porque aún hay gente en la calle».
La identificación ha sido casi imposible pero la Policía Local continúa investigando estos hechos pues no es la primera vez que roban en este local ni es el único robo que se ha producido por la zona en las últimas semanas. Hace algo más de quince días, un bar ubicado en los alrededores del Pabellón Europa también se veía afectado por un robo: «no se llevaron nada porque la alarma inundó de humo la estancia», aseguran desde el bar. No obstante, sí hicieron daños materiales.