El pasado 4 de noviembre se llevó a cabo en Leganés la esperada colocación de una placa en honor al poeta Gabriel Celaya, en el busto realizado por el escultor Eduardo Carretero. Se trata de una forma de identificar la obra escultórica que, hasta el momento, había permanecido sin ningún tipo de señal por lo que pasaba totalmente desapercibida para los viandantes.
Este homenaje llega después de más de 15 años de insistentes peticiones vecinales y contó con la presencia de dos de ellos Luisa y Ricardo, quienes asistieron a la inauguración junto al primer teniente de alcalde, Carlos Delgado (ULEG), y la concejala de Cultura, Educación e Infancia Mercedes Neria (ULEG).
Gabriel Celaya (1911-1991), una de las figuras prominentes de la poesía social española, es recordado por su firme compromiso con causas sociales y políticas, especialmente durante el franquismo, cuando empleó su obra para reflexionar sobre las problemáticas de su tiempo. De hecho, es considerado uno de los principales representantes de la que se denominó como “poesía comprometida” o poesía social.
Nacido en Hernani, Guipúzcoa, y con una extensa carrera, Celaya fue galardonado con el Premio Nacional de las Letras Españolas en 1986 y dejó un legado literario enfocado en la transformación social. Su poesía buscaba influir en el cambio y la justicia, una misión que transmitió en sus versos y en sus participaciones públicas, como su postulación en las elecciones de 1977 en la lista del Partido Comunista.
Por su parte, Eduardo Carretero, autor del busto de Celaya, fue un escultor granadino reconocido por sus obras de retrato. A lo largo de su carrera, repartió su arte por toda España a través de obras monumentales y esculturas urbanas.
La instalación de esta placa rinde homenaje tanto a la obra poética de Celaya como al propio busto que Carretero realizó en su honor, además de responder a las peticiones de los vecinos y vecinas de Leganés.