Todos sabemos que el mal tiempo afecta a la circulación y este 8 de mayo, la amenaza de lluvia está afectando a las carreteras. Así se ha visto en la A42 entre Leganés y Getafe. Esta es una de las vías más transitadas pues se trata de la ‘Autovía de Toledo’ que divide físicamente ambos municipios.
Cercano a las 12 de la mañana, el tráfico en esta vía era bastante denso. Una situación que se ha ampliado más de una hora. Tanto que la DGT alertaba de fuertes retenciones a través de los paneles de tráfico así como en sus redes sociales. ¿El origen? El aumento de la densidad de vehículos debido al mal tiempo.
La DGT advierte de los riesgos de conducir en lluvia
La lluvia es el fenómeno atmosférico más frecuente y que más problemas causa a la circulación: con el asfalto mojado, la adherencia de los neumáticos disminuye y las frenadas se alargan. Cuando comienza a llover, las primeras gotas de lluvia pueden hacerlo muy deslizante. El exceso de agua en el parabrisas, los cristales empañados y las salpicaduras de otros vehículos reducen la visibilidad. Y el agua acumulada puede hacer que el vehículo patine.
Cómo conducir en lluvia
- Circule más despacio. Reduzca la velocidad, manteniendo la distancia de seguridad adecuada con los demás vehículos.
- Buena visibilidad. Asegúrese del buen estado y funcionamiento del alumbrado, las escobillas limpiaparabrisas, la calefacción y la luneta térmica. Circule con las luces de cruce encendidas.
- Con suavidad. Acelerar y frenar de forma brusca puede hacer perder tracción y el control del vehículo por acuaplanin
