El delantero llega desde Grecia para cumplir su segunda etapa como jugador del CD Leganés cedido hasta final de temporada.
El atasco en las operaciones del CD Leganés empieza a desaparecer en pleno 31 de enero. La cesión de Miguel Ángel Guerrero es el tercer movimiento oficial del día tras la llegada de Bryan Gil y la marcha de Christian Rivera. Javier Aguirre cuenta con uno de sus deseados refuerzos para una posición que se vio muy mermada durante este mercado de invierno.
Como solicitaba el entrenador mexicano a lo largo del mes, Guerrero aterriza para vestirse de corto y rendir nada más poner los pies en Leganés. El ariete llega en buena forma después de haber defendido la camiseta de Olympiacos en 27 ocasiones este curso y haber sido un fijo en su esquema durante el anterior. Este mismo sábado se ejercitará de nuevo en la ID Butarque y si el cuerpo técnico lo considera oportuno podrá redebutar como pepinero este domingo frente a la Real Sociedad.
En esta ocasión, el punta firma en calidad de cedido y acude al rescate de una delantera en horas bajas. Las salidas de Sabin Merino y En-Nesyri habían provocado que el cuadro leganense se replanteara incluso su esquema, que ahora tratará de enriquecer con nuevos efectivos hasta la medianoche.
El fichaje del toledano aportará veteranía en una entidad que ya conoció desde dentro durante dos temporadas en las que anotó nueve tantos. Además, el destino ha permitido que el jugador vuelva a lucir el número ‘9’ con la blanquiazul. Su presentación ante los medios de comunicación queda pospuesta para la próxima semana, al igual que la de Bryan Gil, la otra incorporación invernal.