La falta de lluvias y el calor hace aumentar los niveles de partículas en suspensión. Los pacientes con asma o dolencias respiratorias deben empezar a tomas ligeras precauciones. Los alérgenos también están en aumento, sobre todo gramíneas y olivo.
Los niveles de calidad del aire de Leganés están en amarillo. Aunque no hay que tomar medidas, sí que se recomienda tener precauciones entre la población de riesgo, no tanto por los menores sino por los pacientes con asma o dolencias respiratorias. Así, se permite hacer ejercicio y pasear sin problemas pero se advierte que hay que tener en cuenta las variaciones de estos niveles.
Según la estación de calidad del aire de nuestra ciudad, las partículas PM10 son las que están más presentes. Estas partículas, que pueden ser de multitud de contaminantes diferentes, presentan efectos nocivos ambientales. Su principal emisor es el transporte, aunque también tienen una componente «no antropogénica«, es decir, ajena a la acción del hombre, de difícil control, que es la entrada de vientos saharianos.
No obstante, la acción del transporte es esencial para este aumento. En un mapa de contaminación se puede ver claramente el aumento que se vive en los focos de población. Móstoles, Alcorcón, Getafe, Fuenlabrada y el centro de Madrid son los focos más cercanos a Leganés. Todos ellos se encuentran en niveles similares, debido a la acción de los vehículos.
Lejos de remitir, el calor y la falta de lluvias de esta época, está aumentando los niveles de contaminantes. Los cuales suelen estar más presentes en las últimas horas del día, al igual que los alérgenos. Estos también se encuentran altos, sobre todo, los pólenes de gramínea y olivo.
