Las ordenanzas fiscales han pasado la aprobación inicial en un Pleno lleno de polémicas con la ausencia de PP, VOX, ULEG y Podemos.
En un atípico Pleno a puerta cerrada, Ciudadanos, PSOE y Más Madrid-Leganemos votaron la propuesta de modificación de ordenanzas fiscales en su fase inicial. En ellas se incluía la subida del IBI al 0.4% establecida por ley y criticada por el resto de grupos y la Federación de Asociaciones de Vecinos. Desde el exterior, los grupos de PP, VOX, Podemos y ULEG criticaban que se hiciera a puerta cerrada.
Finalmente, los 15 concejales presentes votaron la propuesta. Los tres ediles del grupo municipal Ciudadanos eran los únicos en votar en contra y con más votos a favor que rechazándolo, la propuesta seguía sus trámites de elaboración para que, previsiblemente, puedan ser aprobadas definitivamente el próximo mes.
El voto ha sido muy controvertido ya que los miembros de la oposición, ausentes en la sesión, le recriminaron que hubiera cambiado el voto. «En la comisión votaron a favor de las ordenanzas», aseguraba en Twitter el grupo municipal PP. «Si hubieran estado PP, VOX, ULEG y Podemos en el Pleno, las ordenanzas no habrían salido adelante», respondía Enrique Morago, edil de Ciudadanos.
Clave para el Pleno a puerta cerrada
Por otra parte, Ciudadanos también ha sido criticado por acudir al Pleno a puerta cerrada ya que la presencia de sus tres concejales hacía posible el quorum necesario para celebrar la sesión. Con su ausencia, la sesión en la que se debatieron propuestas de grupos que no estaban presentes, no podría haberse celebrado.
«Si no se hubiesen escondido @Cs_Leganes junto con el PSOE no habría habido mayoría para celebrar el pleno a puerta cerrada y no se habría aprobado la subida de impuestos. Ya veremos en la aprobación definitiva que hace Cs porque el resto de formaciones votamos en contra fijo», le echaba en para Miguel Ángel Recuenco.
