Las obras de la Parroquia San Salvador siguen su curso. A consecuencia de las obras de rehabilitación de la cúpula del edificio, iniciadas al aparecer grandes grietas en su parte interior, se han realizado estudios para averiguar la raíz del problema. Y es que las grietas podrían tener su origen en movimientos de los terrenos.
Durante estos trabajos se ha procedido a retirar el mobiliario y las baldosas del edificio para, con la ayuda de maquinaria pesada, poder analizar los cimientos y realizar un estudio arqueológico bajo la estructura. En él se han encontrado restos del templo anterior que difieren en tamaño y forma al edificio actual así como restos humanos provenientes de la necrópolis de la Parroquia.
Tal y como ha detallado la empresa encargada de este estudio arqueológico en un informe al que LEGANÉS ACTIVO ha tenido acceso, se han encontrado cerca de 20 sepulturas, en su mayoría concentrados en la zona más próxima al altar. Cabe destacar que gran parte de ellos corresponden a cadáveres infantiles donde destaca la sepultura de una mujer joven cercana a un bebé de un año de edad. Estos han sido los únicos restos que se han exhumado debido a que solo se ha analizado la capa superficial de terreno.
Todas las sepulturas identificadas corresponden al primer tercio del siglo XIX, que coincidiría con el proceso de despoblación de Polvoranca y la época del epidemia del cólera en España. A pesar de estar prohibido desde que Carlos III lo promulgara en 1784, en Leganés se seguía enterrando a personas en el interior de las Iglesias, tal y como narran periódicos del momento.
Antiguo templo mudéjar
Gracias a estos estudios, también se ha podido confirmar que el santuario está construido aprovechando parte de los cimientos de un templo mudéjar. De hecho, las hipótesis apuntan a que las pequeñas dimensiones del templo principal hicieron necesario construir una ampliación.
Probablemente podría haberse dedicado a otros fines ya que el templo no coincide con la planta actual ni en dimensión ni en forma; cuya advocación era a la Santísima Trinidad, posiblemente un edificio fabricado en ladrillo de escasa importancia, según el informe.
Sin embargo, de este antiguo templo no se tienen muchos más datos ya que, según apuntan los expertos, la instalación de la calefacción de los años 70 eliminó valiosa información. La parte más antigua del edificio actual, el ábside, data de 1520, del gótico tardío.