Las reivindicaciones de la educación pública han salido de las aulas de los institutos de secundaria y bachiller para ocupar las calles de Leganés. En medio de una jornada de huelga educativa en toda la Comunidad de Madrid, estudiantes y profesorado de Leganés han organizado una marcha por el centro de la ciudad para llevar a cabo sus reivindicaciones.
Concentrados en el campus de la Universidad Carlos III de Leganés, centenares de personas esperaban a las 12 de la mañana el visto bueno de la Policía Nacional y Local para poder comenzar. «¿Qué es esto? ¿Lo de Palestina?», preguntaban algunos universitarios. Y es que la huelga tan solo ha afectado a secundaria y bachillerato en este caso. Pero pronto no había duda. «¡Educación pública! ¡La profe, luchando, también está educando!», gritaban.
A buen ritmo, en apenas 20 minutos una larga comitiva de miembros de la comunidad educativa con alumnado de los IES Siglo XX, Gabriel García Márquez, Isaac Albéniz, Salvador Dalí o Butarque, ha llegado a Plaza España. Allí han comunicado las reivindicaciones que han llevado al profesorado a la huelga.
Reducción de número de clases con las mismas horas de trabajo
«Hoy defendemos la bajada de horas lectivas, que volvamos a tener los derechos laborales que teníamos en 2010», ha asegurado María Muñoz, miembro de Menos Lectivas y profesora de un instituto de Leganés. «Defendemos poder tener tiempo para prepararnos las clases con tiempo y poder ser buenos profesionales, queremos hacerlo cada vez mejor, pero necesitamos ser más», apuntan los sindicatos.
Y es que, actualmente los profesores utilizan gran parte de su jornada laboral en impartir clase, apenas dejando 6 horas a la semana para preparar las clases, dar tutorías, reuniones con las familias o formarse. «Es imposible», asegura Muñoz en declaraciones a Leganés Activo. Por eso, reclaman una bajada de horas lectivas, que no de jornada laboral: «En mi caso, soy profesora de filosofía, si me bajan 3 horas lectivas a la semana me quitarían dos grupos, es decir, 60 alumnos menos, lo que me da más tiempo para centrarme en el resto». En esta línea, reclaman una reducción de la burocracia.
Aulas de hasta 38 alumnos «inviables» para los profesores
Pero los profesores no solo reclaman para ellos sino también para los estudiantes. En este sentido, exigen que se bajen las ratios, es decir, el número de alumnos por aula. «Con estas ratios no entramos ni en el patio», gritaban los manifestantes en el recorrido. Actualmente hay 27 alumnos máximo en las aulas de primero y segundo de la ESO mientras que en bachillerato se sube a 38. Un número que es imposible gestionar.
Esto se suma a la falta de infraestructuras en unos institutos pensados para un menor número de alumnos por clase. «Defendemos que estos chicos no estén hacinados en las aulas», reclamaban en el manifiesto. Por ello, lo que se reclama también por parte por de los sindicatos, profesores y alumnos es una mayor inversión en los centros. Sobre todo teniendo en cuenta que cada vez es más necesaria la construcción de centros nuevos.
Finalmente, los profesores también han reclamado una reducción de alumnos por orientadora ya que la OCDE indica que haya 250 orientadores por cada mil alumnos, y la Comunidad de Madrid cuenta con tan solo uno para cada mil. Además, defienden que se hagan políticas para reducir la segregación, denunciada por los indicadores europeos.
Silencio desde la Comunidad de Madrid
Todas estas reivindicaciones se han puesto sobre la Mesa de Educación que los sindicatos comparten con la Comunidad de Madrid. Sin embargo, el gobierno de Isabel Díaz Ayuso no ha querido cumplir estas reivindicaciones, mostrando una contraoferta que los sindicatos han calificado de «ridícula». Por ello han acudido a la huelga en esta jornada.
«Si somos servicio esencial, que los somos desde la pandemia, lo tenemos que ser para todo. También para dotarnos de plantilla y recursos«, sentencian desde CSIF.