El Laboratorios Ynsadiet Leganés se despide definitivamente de la Liga Endesa. Y lo hace en casa con una derrota frente al equipo con el que inauguró su andadura en esta temporada: el Casademont Zaragoza de su ex jugadora, Imane Tate. Sin nada que perder desde hacía varias jornadas, las del conjunto pepinero han saltado al Pabellón Europa con la ilusión de dar un buen espectáculo a su público.
Arrancaba el juego con un gran Ynsadiet Leganés en la pista. En apenas unos minutos el conjunto azulón se ponía por delante haciendo soñar a todos los presentes. Las jugadoras arrancaban con una soltura en el juego que el Zaragoza no era capaz de enfrentar para enfado de su entrenador con un brillante tandem Pierre Louise-Jankovic. Así cerraban un primer tiempo espectacular con 18-11 en el marcador.
Las de Leganés estaban en su salsa, jugando en casa y disfrutando del encuentro. Se las notaba. La puntería las acompañaba. Con el tandem formado esta vez por Houser y Salinero, las de Nacho García conseguían seguir anotando a placer aunque las de Zaragoza empezaban a hacer mejor trabajo en defensa y encarrilaban su tendencia anotadora. Con una férrea defensa, las de Carlos Cantero bloqueaban todos los tiros de las pepineras consiguiendo la remontada a escasos segundos del descanso: 35-36.
En el tercer tiempo el juego se volvió mucho más intenso. Las de Zarzagoza peleaban cada balón hasta el suelo provocando incluso algunas caídas y salidas de pista. Las de Leganés mantenían el ritmo pero la puntería las había abandonado. Tanto es así que Houser llegaba a robar un balón bajo canasta y, sola, lanzaba a placer pero el balón se escapaba del aro lo que hacía que las de Zaragoza marcaran un triple primero y una canasta justo después yéndose del partido. 41-49.
Desde ese momento, el Leganés notaba la falta de cambios y el Zaragoza se mostraba de lo más activo. Poco a poco se distanciaban en el marcador y sin apenas darse cuenta terminaban el tercer tiempo con un 49-70. En el último cuarto, la puntería no acompañó a ninguno de los dos conjuntos, y aunque las locales conseguía recortar distancias con una acertada Pierre Louise pero no era suficiente. 53-76. Un amargo sabor de despedida de una categoría que ha dado muchas alegrías (y muchos quebraderos de cabeza) al Leganés.
