Con tan solo 14 años, la joven nadadora del Club Natación Leganés sueña con competir contra los mejores en los próximos Juegos Olímpicos. Una meta que, para su entrenador es perfectamente alcanzable: «Su nado tan técnico hace que siendo infantil hace marcas de nadadores de categoría absoluta». Residente en Parla, la familia de Sara Lahrach solo tiene palabras de agradecimiento al Club de Natación Leganés. «Nos acogieron cuando el Real Canoe eliminó su sede en Parla. Siempre nos han tratado estupendamente«, explica su padre.
¿Cuándo empezaste a nadar?
Al principio no me gustaba nada. Mi madre me llevaba como todas las madres a la piscina a aprender a nadar y yo lloraba mucho porque me daba miedo. Pero luego me metieron en los cursillos de los Ayuntamientos y allí un entrenador me dijo que me veía un poco buena. Ahí me metí en un club y empecé a nadar para competir, esforzándome muchos en los entrenamientos. Poco a poco dieron sus frutos.
¡Tanto que te convertiste en Campeona de España de braza!
Sí. Fue en Tarrassa. En ese campeonato tenía que hacer la marca mínima para clasificarme para el Europeo. Estaba muy nerviosa pero trataba de no pensarlo porque sino sabía que no podría hacerla. Al final me salió y estuve súper contenta, ¡y me clasifiqué!
¿Cómo fue la experiencia en el Europeo?
Muy buena. Porque estuvimos una semana y media de concentración en Sierra Nevada todos los nadadores que habíamos hecho la mínima y nos habíamos clasificado. Después, una semana antes del Campeonato fuimos a San Cugat y desde allí nos fuimos a Malta, donde era el Campeonato. La experiencia fue de diez porque todos hicimos piña y los entrenadores también eran muy agradables con nosotros. Una experiencia que nunca voy a olvidar.
Te trajiste una medalla de plata…
En el relevo de 4×100 estilos; en el 200m braza quedé 7ª y en el individual de 100m braza quedé 4ª por muy poco. Me dio mucha rabia porque quedé a 7 centésimas de la tercera, a 1 décima de la segunda y a 2 décimas de la primera. Se decidió todo en la llegada a la pared.
En estas situaciones, ¿eres consciente de la poca distancia con tus competidoras?
A veces las veo por el rabillo del ojo y sí me doy cuenta pero la mayoría de veces no. Cuando nado no pienso nada, estoy concentrada en mi actuación. En este caso sí me di cuenta de que había una que sí iba un poco adelantada de mí pero no me dio tiempo.
¿Por qué cambiaste la mentalidad: de no gustarte el agua a no salir de ella?
[Risas] Lo empecé a ver divertido. Nos animamos y arropamos mucho unos a otros. Es un deporte individual pero se genera mucho equipo porque por fuera de la piscina tienes a tu club animándote.
¿Cómo fue la primera vez que competiste?
Creo que fue un campeonato de Madrid, alevín, con 11 años. Recuerdo que yo iba en la primera serie, donde van los que no tienen muy buenas marcas, pero quedé tercera de Madrid. Ahí empecé a nadar mucho mejor la braza y a especializarme en ella. Empecé a pensar que a lo mejor valgo para la natación [risas].
En el último campeonato de Madrid te alzaste con el oro en los 400 metros estilos, ¡enhorabuena!
Gracias. Estuve entrenando el viernes por la mañana y esa tarde nadé el 50m libre que me salió regular. El sábado por la mañana gané el oro y por la tarde tuve 100m libres. El domingo siguió la competición y por la mañana tuve el 200m libre y el 100m espalda por la tarde.
¿Cómo te preparas para poder aguantar este ritmo en las competiciones?
Entreno tres días a la semana por la mañana, 2 horas de agua y una de seco, y por la tarde, 2 de agua. Y otros tres sólo por la mañana. Estoy de lunes a sábado en la piscina.
¿Cómo lo compaginas con los estudios?
Estoy en el Centro de Tecnificación y ahí nos hacen más fácil compaginarlo porque lo tenemos todo en un mismo edificio. Entrenamos en la piscina por las mañanas y cuando terminamos, nos cambiamos y en la planta de arriba está el instituto. Además, como la Federación Madrileña de Natación habla con el instituto y nos ponen los exámenes cuando no tenemos competiciones; algo que no te hacen en otros institutos.
¿Cuál es tu objetivo en unos años?
Quiero tener mis estudios porque quiero dedicar profesionalmente a la natación. Mi objetivo es estar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Pero de momento, este año me quiero hacer la mínima para la FOJE [Festival Olímpico de Juventud Europea] y avanzar poco a poco para en 2020 llegar a Tokio.
