Los ‘makers’ de la Universidad Carlos III de Madrid han creado 100 viseras en el fin de semana que han entregado al Hospital Severo Ochoa. Esperan seguir produciendo al mismo ritmo
La Universidad Carlos III de Madrid ha puesto a trabajar sus impresoras 3D para un solo objetivo: crear material sanitario que se necesita en los hospitales. Con más de una veintena de impresoras, algunas de ellas cedidas por otras instituciones como colegios de Leganés, Fuenlabrada, Alcorcón o Valdemoro, los voluntarios han conseguido crear 50 viseras y pantallas para proteger a los sanitarios de los posibles contagios.
Desde el pasado fin de semana, los ingenieros de la universidad comenzaron a investigar sobre cómo podían imprimir el material necesario: «los respiradores es un tema muy complejo y aún no se ha llegado a un modelo homologado aunque se está estudiando a fondo, lo mismo pasa con las mascarillas, por eso comenzamos con las viseras», explica Juan Victores, profesor asistente del laboratorio de robótica.
Aunque en un primer momento los profesores imprimían en sus casas, pronto los propios alumnos comenzaron a moverse pidiendo poder utilizar las impresoras que había en el laboratorio. «Pedimos la apertura por necesidad para poder ayudar y ahora estamos utilizamos todas las impresoras de la universidad, y algunas donadas, manteniendo las medidas de seguridad necesarias».
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En tan solo un día, el equipo de voluntario consiguió hacer 50 viseras que fueron entregadas en mano al Hospital Severo Ochoa este viernes, mientras que el sábado pudieron crear una nueva remesa que también ha sido entregada. «Aún estamos en la puesto a punto y las impresoras no están al cien por cien de su rendimiento», destaca Victores quien espera mejorar el ritmo de producción.
Cómo podemos ayudar
El grupo de makers, que así se llaman los creadores de piezas a través de impresoras 3D, está compuesto por más de una decena de voluntarios de ingeniería de los Departamentos de Ingeniería de Sistemas y Automática y de Bioingeniería e Ingeniería Aeroespacial. Sin embargo no son los únicos que pueden colaborar.
Quien tenga una impresora 3D en su casa puede unirse a un grupo de colaboradores a través de Telegram, donde se organizan para la compra de los materiales y la creación de estos. Estos están organizados por zonas para una mejor organización. Si eres de Leganés, este es el grupo.
Desde la Universidad aseguran que la producción está completa al igual que las materias primas, sin embargo hay formas para poder ayudar a la investigación del coronavirus. Una de las formas, la más sencilla, es la instalación de un programa en nuestro ordenador con el que ayudar a ejecutar simulaciones. Un sistema que ya se utilizó en la investigación del ébola para compartir datos entre los científicos.
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