El joven de 21 años ingresó en Leganés este sábado, padece neumonía bilateral a causa del COVID.
Óscar disfrutaba del final del mes de julio en su pueblo, unas vacaciones antes de irse a vacunar. Junto a sus amigos, acudió al río a darse un baño y pasar un día refrescante: se bañó en el río, tomó el sol, jugó en la orilla y río con sus amigos… Apenas unos días después el joven de 21 años se despertó con mal cuerpo, malestar general y dolor de cabeza; molestias que fueron a más en los días siguientes.
Cuando llevaba una semana con fiebres y dolores en todo el cuerpo acudió a urgencias. Ahora está ingresado en la planta COVID del Hospital Severo Ochoa. «No creía que esto me pudiera pasar a mi, y si me pasaba, no tan fuerte como me está dando», aseguraba el joven que padece una neumonía bilateral que la dificulta la respiración y le hace estar agotado.
Y es que, la edad de hospitalización del coronavirus cada vez es más baja. Mientras que en la primera ola afectó a los mayores de 65 y las siguientes a los mayores de 40; esta quinta ola está centrándose en los menores de 35 años. De hecho, en el Hospital Severo Ochoa los pacientes más jóvenes están en la veintena mientras que el más joven de la UCI tiene 34 años.
Estos son los efectos de la nueva variante delta con mayor virulencia y más contagiosa, pues los pacientes se agravan más rápidamente. Que sea más contagiosa sería el principal motivo por el que está atacando a los más jóvenes pues tienen mayor vida social en estos momentos de vacaciones de verano, por lo que los sanitarios insisten en mantener las medidas de distancia social y mascarilla en todos los encuentros.
