La Virgen de Butarque ha recuperado su tradicional procesión por el centro de la ciudad. Tras dos años con modificaciones por la incidencia del coronavirus, la procesión por el gran día de Nuestra Señora de Butarque se ha podido celebrar con normalidad y las ganas de fe se han hecho notar.
Puntualmente, los fieles se congregaban a las 9 de la noche a las puertas de la Parroquia de Nuestra Señora de Butarque para volver a ver a la Virgen, tras el traslado realizado el día anterior. Con los últimos rayos de luz del día, la imagen salía de la Parroquia iluminada por sus propios candiles alumbrando el camino.
Un camino, alterado debido a las obras de la Parroquia San Salvador, que recorría las principales calles del centro de la ciudad. Con la presencia de las autoridades eclesiásticas y políticas de la ciudad, la imagen llegaba a la Plza. de la Fuentehonda donde un gran número de fieles esperaba el paso de la Virgen. Tras ello, encaminando la calle Antonio Machado llegaban a Plza. de España donde también había fieles sentados esperando el paso de la imagen.
La Avda. Fuenlabrada, Avda. de la Universidad y calle Butarque eran las siguientes vías por las que la virgen era protagonista hasta llegar a la Plza. de Don José Ramos Zambrano, frente a la Parroquia Nuestra Señora de Butarque en la que se ha vuelto a refugiar para ser honrada las próximas semanas con los diferentes actos litúrgicos.
Noticias relacionadas – Sigue leyendo
Como ya es tradición, el ritmo era marcado por la Banda Sinfónica de la Escuela Municipal de Música Manuel Rodríguez Sales de Leganés, que abría la comitiva, y la Agrupación Musical Fénix de la Esperanza quienes cerraban el paso tras la imagen de la Virgen y la Hermandad. A su alrededor se congregaban un gran número de fieles que, en silencio, arropaban a la imagen en su procesión.