Unión por Leganés – ULEG ha denunciado ante la opinión pública del aumento de la morosidad del Ayuntamiento de Leganés. En boca del partido, se trata de «otra muestra más de la incompetencia del alcalde y de su gobierno de Leganés, que pese a tener un ayuntamiento que año tras año genera millonarios superávit que derrocha en asfalto y en contenedores para tener guardados en un hangar ahoga a decenas de pequeñas empresas, profesionales y autónomos pagándoles tarde, mal y, a veces, nunca«.
A día de hoy se ha conocido en la Junta de Gobierno el informe de Intervención donde se alerta del incumplimiento del periodo medio de pago a proveedores conforme al artículo 18.5 de la Ley 2/2012, de 27 de abril, de estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera yéndose a 135 días cuando deberían ser 30.
Si aplicadas las medidas anteriores persiste la superación en más de 30 días el plazo máximo de pago previsto en la normativa de morosidad se podrá proceder por el órgano competente de la Administración General del Estado, previa comunicación de la Comunidad Autónoma en el caso de que ésta ostente la tutela financiera de la Corporación Local, a la retención de recursos derivados de la participación en tributos del Estado para satisfacer las obligaciones pendientes de pago que las Corporaciones Locales tengan con sus proveedores. Para ello, se recabará de la Corporación Local la información necesaria para cuantificar y determinar la parte de la deuda comercial que se va a pagar con cargo a los mencionados recursos
artículo 18.5 de la Ley 2/2012, de 27 de abril, de Estabilidad presupuestaria y sostenibilidad financiera
Para el partido vecinal esta situación ratifica que Leganés no tiene un problema de recursos, ni de capacidad o músculo económico o financiero, sino que tiene un problema de gestión. Esto, según el partido, es «fruto de tener al frente de la ciudad a los posiblemente peores gobernantes habidos en la historia de la localidad aunque los mejores a la hora de buscar excusas y poner en marcha cortinas de humo».
“Ya saben: cuando la culpa no es de un ciberatarque, es de Putin, de la Interventora, del cambio climático, de ULEG, de las asociaciones de vecinos, de Filomena…, eso sí, despilfarro sin medida en asfalto, cubos de basura o incluso whisky de importación”, señala el candidato a la alcaldía y concejal-portavoz del partido independiente Carlos Delgado, quien apunta “por suerte ya quedan poco más de 7 meses para que los vecinos se den la oportunidad de apostar por otro tipo de gobernantes y de gobierno, uno liderado por ULEG donde se gestione como hace la inmensa mayoría de familias pepineras, donde se sabe dónde está lo prioritario y donde nadie piensa en lujos y derroches si no están cubiertas las necesidades básicas: alimentación, vestido, vivienda, educación, salud…”.
