A días de que inicie oficialmente el curso político, el ambiente entre el Gobierno local (PP y ULEG) y la oposición sigue siendo tenso. Este viernes se celebraba en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Leganés una sesión extraordinaria. El objetivo: debatir las últimas alegaciones a los puntos aprobados inicialmente en el pasado Pleno.
El pago de sentencias, pago de préstamos, asunción de nuevos préstamos o el pago de facturas pendientes eran algunos de los conceptos de estos puntos. La mayoría, aprobados en el pleno de junio por el voto a favor de Vox, una de las pocas formaciones que ha acudido hoy al completo. En Más Madrid se ausentaba un concejal, mientras que en Podemos-IU-AV lo hacía otra edil.
La sesión comenzaba sin ningún contratiempo. Habiendo quorum, el presidente, Javier Oporto (PP) empezaba para dar la palabra a la concejala de Hacienda, María Estévez (PP) que ya estaba preparada para empezar la defensa de los puntos. Sin embargo, el alcalde de Leganés, Miguel Ángel Recuenco (PP) tomaba la palabra. Para sorpresa de todos, retiraba todos lo puntos vistas «las dudas que han surgido». «Vamos a retirar todos los puntos para un mejor estudio», aseguraba. Lo que en un principio sería una buena noticia para pulir los posibles errores de los puntos, se convertía en motivo de disputa.
Indignación entre los miembros de la oposición
Sorprendido, Oporto, explicaba que «retirados todos los puntos no tiene más virtualidad este pleno y se levanta la sesión». Ante la sorpresa, la oposición se levantaba indignada. «Esto es una charlotada. Hay gente que ha tenido que dejar de ir a trabajar para venir aquí y que pase esto», decía Javier Márquez (PSOE). «Hemos dejado de trabajar para venir a esto…», se oía entre la bancada de la oposición. «Esa es la intención», se oía entre los socialistas. «Es igual, son unos sinvergüenzas», decía otro de los ediles socialistas. Mientras tanto, Javier Oporto se afanaba en explicar que con la retirada de los puntos, poco más se podía hacer ante la eliminación total del orden del día.
Desde el PSOE de Leganés defienden que la retirada de los puntos no era más que una maniobra defensiva. «al ver que perderían la votación han decidido suspender de el Pleno». Una postura que califican como «antidemocrática».
No es la primera vez que la oposición se levanta indignada de un Pleno. En la última sesión, los concejales criticaron la actitud de los miembros del gobierno. Concretamente a la hora de responder las preguntas formuladas en el Pleno. Una actitud que ha sido también muy criticada por parte de los vecinos de Leganés.