Ante la falta de batas protectoras, los empleados de esta residencia de Leganés muestran cómo se las han tenido que arreglar para sumar medidas de protección frente al coronavirus.
Los equipos de protección individual (EPIs) de los trabajadores que están conviviendo a diario frente al coronavirus suelen constar de mascarilla, guantes y batas protectoras. El pack no siempre se ha distribuido por completo en los diferentes centros y en el caso de la Residencia Parque de los Frailes de Leganés han tenido incluso que improvisar batas con bolsas de estiércol.
La crítica situación que ha originado la pandemia, con especial énfasis en las residencias de mayores, obliga a extremar las precauciones y las medidas de higiene. Así lo recuerdan también los pasillos de esta residencia, del grupo Aralia, que sin embargo hasta la fecha no ha dispuesto de todos los recursos a su plantilla. Las condiciones en las que realiza sus labores una trabajadora en concreto se expuso de esta manera a través de las redes sociales:
Desgraciada este es el Epi que tiene mi hija en la residencia de Leganes y esto es del lunes pic.twitter.com/ws3i67ueTS
— Carmela (@rojasalvaje) April 29, 2020
Leganés Activo ha tenido acceso a esta historia, en la que se ha visto implicada una empleada reincorporada a su puesto después de superar la COVID-19. A pesar de padecer en el interior de la residencia los efectos de la enfermedad, la situación al regreso seguía avistando lagunas que pueden causar graves consecuencias en la salud de la plantilla y de los residentes.
A modo de prevención, el plantel ha tirado de imaginación y de manualidades para confeccionarse su propio EPI, el cual dista bastante del modelo idóneo. Una antigua bolsa grande de abono, abierta, dada la vuelta y recortada para tener huecos en los que adentrar la cabeza y el cuerpo sirve en estos momentos de parche contra el virus.
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La precariedad del contexto fotografiado pretende alertar de dónde y cómo se está enviando a los profesionales que tienen que lidiar con los mayores y prestar los mejores cuidados para mitigar los efectos del coronavirus. En Leganés, las protestas del Ayuntamiento a la Comunidad de Madrid ya se han trasladado en una obligación judicial para aplicar medidas cautelares. Además, dentro de su plan de desescalada, el Gobierno Regional ha notificado que harán llegar más materiales a estos centros y ampliar la formación sanitaria de sus plantillas, todavía sin fechas concretas.