Este viernes la imagen de Nuestra Señora de Butarque iba a viajar desde Santa Beatriz de Silva en el V Centenario a San Fortunato, en La Fortuna. Un recorrido cargado de simbolismo que ha tenido que cancelarse. El Ayuntamiento no ha dado los permisos para su celebración por falta de efectivos de Policía.
En 2017 se cumplen 900 años de la aparición de la Virgen a un molinero sobre las ruinas de Butarque. La imagen le habló y le mandó construir un templo para ella, lo que hoy conocemos como la Ermita Nuestra Señora de Butarque. Según la leyenda, el molinero al ver la imagen la trasladó hasta su casa, al otro lado del arroyo, para custodiarla. Un recorrido que se iba a repetir el próximo viernes 22.
«Llevaríamos la imagen hasta el arroyo donde el cura de la Parroquia de San Fortunato iría a su encuentro«, explican desde la Asociación de Nuestra Señora Butarque. Sin embargo, la falta de efectivos en Policía Local hacen imposible la salida. «Desde el Ayuntamiento no nos pueden garantizar la seguridad de más de mil personas«, lamentan.
Se trata de una de las procesiones más largas de las planteadas por la Asociación de Nuestra Señora de Butarque. Para celebrarlo solicitaban cortar uno de los carriles de la carretera de La Fortuna. «Queríamos rememorar el camino que hizo la primera talla de la Virgen. Era un recorrido muy especial aunque sabíamos que se necesitarían muchos efectivos de policía, este carril se ha cortado para otras cosas.»
La situación ha llevado a la suspensión de la procesión. En su lugar, la Asociación trasladará la imagen de forma privada para que pueda mantenerse el calendario y quedarse en la Parroquia durante una semana. De esta forma, la Virgen de Butarque continúa el recorrido por todas las iglesias, ermitas y parroquias de la ciudad, entre las que esperan que se encuentre la Parroquia de Zarzaquemada, templo que nunca la ha albergado antes.