Familiares y trabajadores de las residencias de Leganés estuvieron manifestándose en la Marea de Residencias que recorrió Madrid el pasado 23 de noviembre.
Centenares de trabajadores, familiares y residentes han denunciado este fin de semana la mala gestión de las residencias de mayores en toda España. El movimiento ha salido a la calle bajo el nombre de la ‘Marea de Residencias’ reclamando una nueva Ley de Residencias que mejores las condiciones de los residentes y los trabajadores, hasta ahora desbordados y sin apenas medios.
Entre las residencias en pie de guerra se encontraban centros ubicados en Galicia, País Vasco, Madrid, Móstoles, Alcorcón y Leganés. Centros que denuncian la falta de medios que sufren amparados por una legislación que minimiza las exigencias a estos centros. Por ello, reclaman un modelo sociosanitario que reconozca la profesionalidad de las trabajadoras y el cuidado digno a las personas residentes
«Los distintos estamos responsables han cedido la gestión de un derecho fundamental, como es la dignidad, a los depredadores de lo público. Causa directa de un trato infame a los residentes y de la precaridad laboral asistencial de un sector altamente feminizado desviando el sistema, que debiera ser de respeto y cuidados, hacia un sistema focalizado en los beneficios«, registraba el manifiesto que ha sido leído en la Puerta del Sol, que puedes escuchar en el vídeo sobre este artículo.
 
Según la organización, el deterioro de las instalaciones, las jornadas maratonianas de las trabajadoras, la falta de nutrientes en los menús servidos o la falta de material para asistir a los mayores son solo algunos de los ejemplos de que la legislación actual no funciona y no permite un buen desarrollo del cuidado en los centros de mayores. Por ello denuncian el modelo sociosanitario actual «en el que el mal trato a las personas es directamente proporcional a la cuenta de servicios de las empresas».
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La manifestación ha tenido el apoyo de decenas de colectivos entre los cuales se encontraban colectivos que luchan por unas pensiones dignas, algo que, según el manifiesto, afectará «irremediablemente» a las trabajadoras de este sector ya que se encuentran en unas precarias condiciones laborales. Por otro lado, también destacan los problemas físicos que estas jornadas laborales acarrean en las trabajadoras.