En un debate online, diputados y concejales de Más Madrid han analizado los fallos que se han tenido en la gestión de las residencias y las urgentes soluciones.
La organización Compromiso con Getafe ha organizado un debate con concejales de Más Madrid de Leganés, Móstoles, Alcorcón y Comunidad de Madrid sobre la situación actual de las residencias de la Comunidad de Madrid. Una charla en la que se han analizado cuáles han sido los fallos más destacados que se han tenido por parte del Gobierno regional en estos dos meses de pandemia.
Durante el debate se ha concluido la necesidad de una desescalada para las residencias de mayores a la par, y no esperar hasta la fase 3 para que los mayores puedan volver a recibir visitas. «Están sufriendo un deterioro cognitivo brutal», destacaba Ana González, técnica del Ayuntamiento de Más Madrid-Compromiso con Getafe, «se están dando casos de mantener a los mayores encamados dos meses porque es la única forma que los trabajadores han visto para poder trabajar con ellos».
Por ello, Emilio Delgado, diputado de la Asamblea de Madrid por Más Madrid, se destaca que se tiene que empezar a poner sobre la mesa un plan urgente para este colectivo. «Es fundamental que nos presenten algo sobre lo que poder trabajar», aseguraba. Y es que, según los datos de la Comunidad, han fallecido 5929 personas en residencias, un dato que podría ser más: «desde finales de marzo la Comunidad da los fallecidos de ese día y no de una semana como debería».
«No hay gente para que puedan darles de comer, se están muriendo de inanición… han tenido un poco de fiebre pero no les han detectado porque no tienen personal suficiente», destacaba Amparo, familiar de un residente en Vitalia Home Leganés, «hasta el 22 de marzo el Hospital Severo Ochoa no sabían qué ocurría en esa residencia». En este sentido, Delgado ha destacado la necesidad de medicalizar las residencias, tanto con material como con personal suficiente.
Falta de datos y escucha
Delgado ha comenzado su intervención explicando que el 6 de marzo su grupo propuso que se hicieran tests prioritariamente a los sanitarios y trabajadores de residencias para que no se convirtieran en vector de contagio, algo que no se hizo; además de hacer un plan para aislar a los mayores contagiados, que a día de hoy solo se ha hecho en la Residencia de la Paz.
De esta forma, el 18 de marzo se comenzaron a hacer las primeras intervenciones consistentes únicamente en llamadas telefónicas y no fue hasta el 24 cuando se hizo una intervención más en profundidad. «El 24 de marzo se facultó a la Comunidad de Madrid para hacer intervenciones pero solo consiste en meter a un funcionario sin el cual la residencia no puede hacer nada».
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Esto ha derivado en que el 70% de los fallecimientos en la Comunidad de Madrid por COVID19 han sido en residencias. «La Comunidad solo sabe de primera mano lo que ocurre en las 25 residencias públicas, y confiar en lo que la dicen sobre las 475 privadas», recuerda el diputado de la asamblea.
Los ponentes han insistido a lo largo del debate, en base a esta situación, en retomar el proyecto de modificar la ley de residencias cambiando el modelo para poder asumir más plazas públicas, analizar qué tipo de colaboración público-privada se quiere y convertir el servicio en algo asequible para todos. «Hay que dignificar el sector», reclamaban todos los ponentes.
