La Ley de Cambio Climático y Transición Energética fue aprobada en 2021 y en ella se pone el foco en las ciudades de más de 50.000 habitantes. Su principal medida: reordenar el territorio para crear una zona de bajas emisiones, obligando a todos estos núcleos de población (entre los que está Leganés) a establecerlas antes de 2023. Pero el año ha empezado y parece que todo se va a retrasar.
En una entrevista en Cadena SER, el alcalde, Santiago Llorente (PSOE), ha puesto en valor esta medida, “una apuesta de la Unión Europea por reducir la contaminación atmosférica y acústica”, aunque ha asegurado que este modelo aún tardará en implantarse en la ciudad llegando en otoño. «Esto supone peatonalizar calles, construir carriles bici, calmar el tráfico… y son cosas que cuesta encajar«.
Aunque esta no es su única medida para estos núcleos de población, el Gobierno central ha puesto el foco en ello ya que, al igual que ocurrió con ‘Madrid Central’, sería la que tendría unos efectos más acentuados en la bajada de emisiones de CO2.
La decisión pretende reducir de manera considerable las emisiones de gases contaminantes, que además de ser causantes del calentamiento global afectan a la salud de los ciudadanos al empeorar la calidad del aire. El fenómeno ha dejado de ser exclusivo de las ‘superpoblaciones’ y el municipio de Leganés no se escapa de ello, acumulando varios días de alerta por contaminación en las últimas semanas.
Leganés tendrá que hacer los deberes
Desde que se aprobara la ley en mayo de 2021 poco o nada se sabe de esta zona de bajas emisiones de Leganés, más allá de las declaraciones que el alcalde de Leganés, Santiago Llorente (PSOE), realizó en el mes de septiembre de ese mismo año. Y es que, el Gobierno local estaba preparando el proyecto para ser financiado por fondos europeos que finalmente el Ministerio no concedió al Ayuntamiento de Leganés. Este proyecto ideaba una zona de bajas emisiones con semáforos y señalización para evitar altas velocidades y reorientar el tráfico a otras zonas «en función de la contaminación».
Tras el fiasco de la financiación europea, parece que el Gobierno se ha puesto manos a la obra y ahora ya se conoce el trazado que será afectado por esta zona de bajas emisiones. Según declaró en la entrevista en Cadena SER en febrero, esta zona se limitará a las próximas calles peatonalizadas. El Ayuntamiento comenzará por la zona centro, pero Llorente avanza que “se irá ampliando poco a poco”.
Ante este silencio, Leganemos ha exigido al Gobierno de Leganés que haga los deberes y diseñe ya esta zona de exclusión del tráfico para poder ponerla en marcha a lo largo de este año que, además, estará marcado por las elecciones municipales en mayo.
Promoción de la movilidad eléctrica, bicicleta y a pie
Además de esta zona de bajas emisiones, la Ley recoge una serie de obligaciones antes de que acabe el 2023 para los municipios de más de 50.000 habitantes:
a) El establecimiento de zonas de bajas emisiones antes de 2023.
b) Medidas para facilitar los desplazamientos a pie, en bicicleta u otros medios de transporte activo, asociándolos con hábitos de vida saludables, así como corredores verdes intraurbanos que conecten los espacios verdes con las grandes áreas verdes periurbanas.
c) Medidas para la mejora y uso de la red de transporte público, incluyendo medidas de integración multimodal.
d) Medidas para la electrificación de la red de transporte público y otros combustibles sin emisiones de gases de efecto invernadero, como el biometano.
e) Medidas para fomentar el uso de medios de transporte eléctricos privados, incluyendo puntos de recarga.
f) Medidas de impulso de la movilidad eléctrica compartida.
g) Medidas destinadas a fomentar el reparto de mercancías y la movilidad al trabajo sostenibles.
h) El establecimiento de criterios específicos para mejorar la calidad del aire alrededor de centros escolares, sanitarios u otros de especial sensibilidad, cuando sea necesario de conformidad con la normativa en materia de calidad del aire.
i) Integrar los planes específicos de electrificación de última milla con las zonas de bajas emisiones municipales
La concienciación ecologista ha ido ganando terreno en los últimos tiempos y la celebración en Madrid de la Cumbre del Clima del COP25 ha conseguido sumar nuevos adeptos a la causa anticontaminación. Los consistorios locales deben ser los siguientes en incorporarse a la iniciativa mediante planteamientos de reestructuración de sus urbes que contemplen zonas de bajas emisiones.