El concejal del Gobierno, Fran Muñoz, ha emitido un comunicado público en el que niega «rotundamente» las acusaciones de maltrato psicológico
El todavía portavoz de Más Madrid-Leganemos, Fran Muñoz, fue denunciado la pasada semana por su compañera de partido, Eva Martínez, por maltrato psicológico. Tras la denuncia se celebró un juicio rápido en el que el magistrado denegó las medidas cautelares pedidas por la denunciante (orden de alejamiento) pero abrió instrucción para investigar más la causa. Ante las acusaciones, el edil ha emitido un comunicado que reproducimos a continuación:
«Niego rotundamente la acusación vertida contra mí por Eva Martínez Borrega.
He de poner de manifiesto que mientras declaraba en Comisaría, la noticia ya había estallado en medios de comunicación. Esto evidencia que, desde la acusación, se ha informado a la prensa a fin de generar un juicio mediático y paralelo, a sabiendas de la lacra y la consecuente sensibilidad social que moviliza la violencia machista.
Incluso ahora que veo el sistema de protección de las víctimas desde dentro, sigo defendiendo el fortalecimiento del mismo. A pesar de estar siendo muy duro para mí, creo necesaria cualquier herramienta que procure protección a las víctimas frente a sus agresores. Estas gravísimas acusaciones pretenden destruirme en lo personal y en lo político. Son acusaciones falsas que llevan ya semanas difundiéndose de manera inadmisible para forzar mi dimisión y que otras personas puedan conseguir lo que no han podido lograr por la vía de la política.
Hasta ahora se han desestimado todas las medidas cautelares solicitadas por la denunciante, es decir, la orden de alejamiento. En el auto de la jueza de violencia sobre la mujer se dice literalmente: “Analizando cada uno de los episodios concretos relatados por la denunciante, en la denuncia y en la declaración judicial, ésta lo que viene a denunciar principalmente, son cuestionamientos que su expareja hace de ella; no ha relatado agresiones físicas ni intentos de ello, ni conductas intimidatorias o amenazas con causar un mal cierto, concreto, serio y que afecte a bien jurídico protegido penalmente, requisitos estos necesarios para poder apreciar un delito de amenazas, conforme a la jurisprudencia constante del TS. En definitiva, no ha relatado episodio alguno propio del ámbito competencial de un Juzgado de Violencia sobre la Mujer “
Confío en el proceso judicial. Tan importante es en él la protección a las presuntas víctimas, como las garantías de defensa de los investigados. En ese difícil equilibrio y hasta que exista un pronunciamiento firme sobre culpabilidad, ruego encarecidamente que se respete la presunción de inocencia, ya que las informaciones vertidas me dañan gravemente y se me apunta como culpable de unas acusaciones que ya sólo pueden confirmarse en el juzgado, cosa que hasta la fecha no ha ocurrido como demuestra la rotundidad del auto judicial anteriormente mencionado.
Una vez que el daño está hecho, solo me queda confiar en nuestra Administración de Justicia».