La Comunidad de Madrid ha resuelto el concurso de gestión de la residencia pública Parque Los Frailes de Leganés. Después de haber terminado el contrato con Centenari Salud, la empresa ha vuelto a ganar esta gestión «obviando las graves irregularidades detectadas durante los últimos dos años y medio«, tal y como ha denunciado CCOO.
CCOO Sanidad Madrid ha remitido múltiples cartas a la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales y a la Dirección General del Mayor, desde que el Gobierno regional otorgó a Centenari la gestión del centro, denunciando la crítica situación en la que viven residentes y profesionales. El recorte en la alimentación, la escasez de toallas limpias para los residentes, las constantes averías en la lavandería y sus consecuencias o las goteras son algunas de las irregularidades denunciadas en este centro.
En una de las misivas enviadas el año pasado, CCOO llegó a pedir la intervención de urgencia ante lo que consideraba una situación “insostenible” y de “riesgo”. En este centro se acoge a 220 personas mayores y dependientes, que son atendidas por 190 personas. Empleados que también «sufren» la gestión de Centenari Salud en esta residencia: hasta 60 denuncias han sido registradas en la Inspección de Trabajo por impago a los y las profesionales, por la falta de personal y exceso de carga de trabajo.
Esta gestión hizo incluso que la Fiscalía comenzara a investigar la residencia en 2022 pero no se llegó a una conclusión sancionadora. Esto ha hecho que la Comunidad de Madrid vuelva a adjudicar la residencia a Centenari tras haber anulado a su única contrincante.
«Que poco hemos aprendido»
CCOO pone de manifiesto que, precisamente la falta de personal y mala gestión fueron claves en la situación de las residencias de mayores durante la pandemia. Así, recuerda que durante ese tiempo, en la residencia Parque Los Frailes de Leganés murieron 60 personas mayores. El director del centro, cuya gestión estaba adjudicada a la empresa Aralia, «impidió a trabajadores y trabajadoras el uso de mascarillas para no “asustar y alarmar” a los usuarios», según relatan los propios trabajadores.
Según el relato de CCOO, «los profesionales alertaron a la Policía Local y Nacional de Leganés de que en el centro se estaban amontonando cadáveres en las habitaciones, y que no solo era indigno y arriesgado para la salud del resto de las personas que convivían en la residencia sino que además provocaban un olor nauseabundo. Allí también acudieron miembros de la Unidad Militar de Emergencias a retirar los cuerpos de los fallecidos y procedieron -pasados muchos días- a la desinfección de la residencia y las zonas de riesgo».
Premian la oferta más económica
Después de esto, la empresa Centenari ganó el concurso de licitación con la Comunidad de Madrid porque ofrecían unas mejoras de calidad que, en la actualidad, siguen sin cumplir. La puntuación para hacerse con la gestión de una residencia no premia la excelencia del proyecto que se presenta, lo que prima es la oferta económica más baja, a veces incluso en baja temeraria.
Ante esto, CCOO reclama que la Consejería bloquee la adjudicación “sin demora” y medidas que reviertan esta situación, proporcionando así un entorno seguro a residentes y trabajadores. A juicio del sindicato, Centenari ha traspasado todos los límites llevando a los centros que dirige a una situación insostenible, y es “incomprensible” que la Comunidad de Madrid les siga manteniendo en la gestión de varias residencias.
