La plantilla del SEPE se encuentra al límite de su capacidad: envejecida y sin contrataciones, está desbordada por la cantidad de trabajo. En Leganés han visto entrar casos de otros municipios
La explosión de despidos y Expedientes de Regulación Temporal de Empleo de miles de empresas ha hecho que en estas semanas las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), antes conocidas como INEM, estén desbordadas. La carga de trabajo es máxima en un tiempo en el que los empleados se han tenido que amoldar a trabajar desde casa y a una reducción de la plantilla debido a las bajas por enfermedad.
En el caso de Leganés, además, los empleados se están encontrando con una situación fuera de lo común: «están entrando casos a la oficina de gente de Madrid, Argüelles, Parla o, sobre todo, de Vallecas», aseguran a LEGANÉS ACTIVO trabajadores del servicio a que han visto cómo el número de expedientes ha crecido exponencialmente sin que estos sean necesariamente de Leganés.
Esto ha hecho que la oficina, que ya de por sí estaría colapsada con los casos procedentes de Leganés, se esté viendo más desbordada por expedientes de municipios que no les corresponden. Ante esta situación, los empleados hacen un llamamiento para que cada caso se ajuste a su oficina de empleo, y los necesitados de ayudas tengan paciencia a la hora de recibir sus ayudas ya que «hacemos nuestro trabajo lo eficiente y rápido que podemos, estamos desbordados».
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Y es que, según el testimonio de empleados, «esta es la única oficina que responde y está operativa al máximo». CGT alerta de que la situación de la plantilla es totalmente límite: la plantilla estaba ya envejecida con las consiguientes jubilaciones que no se han repuesto, y la falta de contratación, lo que dejó al organismo mermado y trabajando en unas condiciones difícilmente sostenibles. Ahora la enfermedad ha golpeado fuerte causando, además, bajas médicas entre sus empleados.
«Con este panorama es con el que tienen que enfrentarse diariamente trabajadores del SEPE y ciudadanos que requieren de sus servicios. Ambos colectivos descontentos por igual. Y ambos colectivos cargados de razón para estar descontentos», asegura CGT.
Para solventar esta situación, la Administración central ha contratado más plantilla para la atención telefónica, sin embargo, CGT alerta de que no han recibido suficiente formación. Ahora hay una segunda oferta abierta para la contratación de más personal para la gestión de ayudas de la que se desconoce la formación que tendrán.
