Entrevista | Santiago Llorente: «Las viviendas de EMSULE no llegarán hasta dentro de unos años»

Publicidad - Continúe navegando

Santiago Llorente, alcalde de Leganés, analiza la actualidad sobre los servicios sociales, EMSULE y los refugiados que llegan de Ucrania en esta primera parte de nuestra entrevista.

Gracias por recibirnos y aceptar la invitación a la entrevista.

Aprovecho para pedir disculpas porque verdad que hace tiempo que el medio nos había pedido cita y lo teníamos pendiente.

Entendemos la agenda. Hemos conocido hace un par de días el balance de Cruz Roja aquí en Leganés, según los datos se atendieron a más de 6000 personas, como un 3% de toda la población y el perfil son siguen siendo mujeres entre 40 y 50 años en paro o incluso con trabajo pero precario con menores a su cargo, ¿qué opinión le merece esta situación?

Otras noticias - Sigue leyendo


 

Hay un incremento de atenciones a personas vulnerables y de personas que llegan de otros países de Latinoamérica en general, que han estado llegando todo el año pasado. Y es verdad que, bueno, pues hay más peticiones de atención.

Solo 200 personas de las atendidas por Cruz Roja son inmigrantes o solicitantes de asilo.

Sí, pero vamos. En estos días todas las ONG están preparando estos informes y, bueno, dependiendo un poco del perfil de la ONG y qué tipo de atenciones haga, pues van más personas originarias de un sitio o de otro. Yo creo también hay esa llegada de personas de Latinoamérica en general.

- Publicidad Continúe leyendo -
Reparto de alimentos a personas vulnerables. Foto: Cruz Roja

Eso también encaja con un aumento del empleo, es decir, a pesar de que hay más demandantes de ayuda social también hay menos desempleados y más cotizantes a la Seguridad Social. Hasta ahora, porque a partir de ahora no sabemos qué va a pasar. La economía ha ido creciendo a buen ritmo y ha ido encajando también a muchos de los demandantes. La situación no digo que sea buena, pero vamos, que el hecho de que haya más empleo para más personas, eso es un buen dato, que nos permite también ir sacando a estas personas vulnerables y en situación complicada y que se vayan incorporando al mundo del empleo.

En este perfil de mujeres con menores a su cargo y en precario coincide con el de una inquilina de EMSULE que hemos conocido hace poco, que está negociando un desahucio que a día de hoy podría estar parado. Para muchos es un ejemplo de que EMSULE o los alquileres que gestiona carecen de un carácter social para los inquilinos. ¿Cree que es así?

Hay casos y casos y no se puede generalizar. Cada persona tiene situaciones económicas diferentes y hay que estudiar cada uno de los casos. Hay gente que seguramente, si analizamos su situación en este momento, podrían pagar una renta más alta, y otros que a lo mejor habría que bajar la renta. Es decir, no se puede generalizar y habría que ver cada una de las circunstancias. En este caso, por ejemplo, parecía que tenía voluntad de llegar a acuerdo y pagar, y por tanto se ha parado. En otras personas que llevan muchos años sin pagar y no tienen intención de pagar, pues habría que ejecutarlo. Cada caso es diferente.

¿Se estudia cada caso?

Claro. Por eso se ha parado.

Desde la PAH se reclamaba una evaluación de todos los alquileres de EMSULE anualmente.

- Publicidad Continúe leyendo -

Quizá anualmente es un exceso de burocracia pero hay que hacerlo periódicamente, sí, lógicamente.

«Sólo un porcentaje muy pequeño del número de inquilinos de EMSULE tiene ese perfil más de demandantes de ayudas sociales, que son a los que más atención se le se le ofrecen»

Santiago Llorente

¿Se hace?

Pues entiendo que se hace, es decir, sobre todo los en los casos en los que hay impagos. Esta es una empresa en la que hay un porcentaje de impagados muy pequeño y sobre todo en este tipo de casos es donde más atendemos los motivos: si es porque no pueden o porque no quieren. En Leganés hay situaciones dramáticas de gente que no puede pero también hay casos de gente que no quiere pagar y que están viviendo gratis. Entonces, bueno, pues hay desahucios que evidentemente son dramáticos y que hay que intentar impedirlos, porque suponen que hay personas vulnerables que no tienen capacidad de pago, y otras muchas casuísticas que no tiene nada que ver con ese tipo de situaciones, por eso hay que estudiar cada uno de los casos.

Por eso le comentaba este caso en concreto porque, además, se da la casualidad de que es una empresa municipal.

Son viviendas públicas. Realmente la mayoría de los inquilinos no tienen un carácter de vivienda social sino que es un alquiler cercano a los precios del mercado y que no tienen especiales características de ayuda social. Sólo un porcentaje muy pequeño del número de inquilinos tiene ese perfil más de demandantes de ayudas sociales, que son a los que más atención se le se le ofrecen porque tienen una renta muy reducida realmente. Son la minoría de los casos. Hablamos siempre viviendas sociales pero en particular viviendas sociales son muy pocas. Son viviendas ocupadas por personas que tienen trabajo que tienen unas rentas medias y que en su momento lo que se ofreció es una un piso de alquiler, no por motivos sociales sino bueno pues para intervenir en el mercado de vivienda.

protesta emsule
Jóvenes de Leganés empapelan EMSULE pidiendo viviendas asequibles y sociales. Foto: Leganés Activo

¿Cómo va la elaboración del pliego para la construcción de viviendas en alquiler de EMSULE?

Está redactado, en los próximos días hay intención de convocar un Consejo de Administración. La idea es un poco, en primavera, aprobar el mecanismo por el que se van a adjudicar las viviendas de compra y alquiler, las dos. Pero estamos todavía en fase preliminar de desarrollo de esas viviendas, es decir, que es algo que que viene detrás. Primero tiene que haber un proyecto, licitar las obras y después hay que hacer un sorteo y explicar cuáles son las fórmulas de acceso a esas viviendas. Pero vamos, que todo eso va detrás. Realmente ahora mismo hacer un sorteo para ver quién es el demandante de alquiler cuando no se va a entregar la vivienda hasta dentro de unos años…

Ahora mismo Leganés es una ciudad refugio para los ucranianos que huyen de la guerra, lo vimos en la concentración del pasado sábado, ¿cómo se está gestionando la llegada de refugiados ucranianos a la ciudad?

Ahora mismo se está autogestionando. Realmente quienes están viniendo son familiares de las personas que viven aquí en Leganés. Cuando comenzó la crisis la guerra rápidamente a ver al padrón cuántos originarios de Ucrania y nos quedamos sorprendidos. No era consciente de cuántos ucranianos había aquí en Leganés [1.200]. La verdad es que las personas que van llegando van viniendo a casa de la familia… Poco a poco algunos se va empadronando pero a un ritmo lentísimo, es decir, las personas están viniendo a Leganés huyendo de la guerra y la sensación que tenemos es que están esperando para ver si la guerra va a durar dos años o dos meses. Me imagino que muchísimas personas volverán a su país, otras no, pero hay un nivel de incertidumbre muy grande. De momento en las pocas cosas que nos van pidiendo las estamos abordando sin ningún tipo de problema.

«Es muy complicado llevar nada a un país en guerra y es muy complicado encontrar a alguien que lo recojan las fronteras. No es nada sencillo. Hay muchas entidades y personas, con la intención de ayudar, que han estado recogiendo cosas y que ahora mismo pues no saben muy bien qué hacer con ello».

Santiago Llorente

Ha habido una ola de solidaridad muy grande en Leganés con Ucrania con donaciones materiales en diversos puntos de la localidad.

Nosotros hemos sido muy prudentes con ese tipo de informaciones. Me alegro de que seamos todos tan solidarios pero, a mí quienes me han llamado preguntando que si vamos a recoger material les digo que el problema de la logística es gravísimo. Es muy complicado llevar nada a un país en guerra y es muy complicado encontrar a alguien que lo recoja en las fronteras. No es nada sencillo. Hay muchas entidades y personas, con la intención de ayudar, que han estado recogiendo cosas y que ahora mismo pues no saben muy bien qué hacer con ello. Que a lo mejor dentro de quince días nos hace falta todo eso, y por eso digo que no está mal la recogida, pero realmente es muy difícil llevarlo a Ucrania. Es que está lejos en carretera, el transporte es complicado y una vez en la frontera es difícil encontrar a alguien fiable a quien entregarles ayuda humanitaria que se ha recogido aquí con toda la buena voluntad del mundo. Ni siquiera las ONGs grandes son capaces de transportar allí cosas por eso piden dinero para hacer compras a los países limítrofes. Entonces, bueno, algunas personas han conseguido llevar allí cosas a quien sea y lo que se ha recogido para muchas asociaciones lo tienen almacenado y un poco esperando a ver si es necesario aquí o no pero bueno de momento pues un poco de paciencia.

Se ha articulado mucho a través de la Embajada [que ha habilitado un número de teléfono directo].

grupo trabajo refugiados leganes
Grupo de trabajo para la acogida de refugiados ucranianos. Foto: Ayuntamiento de Leganés

Es que la Embajada no ha pedido absolutamente nada. Yo con todo el respeto del mundo, mucha gente habla de la embajada de Ucrania, la embajada de Ucrania está comprando armas. En la página web hay una cuenta corriente donde piden donaciones y explican que es para comprar armamento [no lo hemos encontrado]. Es decir, la embajada de Ucrania ahora mismo tiene la cabeza en otras cosas. ¡Que es un país en guerra! Esto no es una crisis humanitaria fruto de las lluvias o la sequía, esto es una guerra. La embajada, que es pequeña, tampoco tiene grandes capacidades para estar pensando ahora mismo en transportar ropa de aquí a allí.

Hay que entender también la situación, que la buena voluntad también a veces choca con la práctica del transporte, la logística… Entonces, hay que esperar cómo transcurren en estas próximas semanas y ver si hace falta aquí o hace falta allí y si somos capaces de habilitar algún tipo de espacio… Sobre todo lo que es complicado es encontrar en Ucrania alguien que esté organizado y que lo reparta a la población. Porque lo que no queremos es que lo que mandamos para allá al final se revenda, aparezca en el mercado negro, aparezca en otro país. Es decir, ya que esto se trata de la generosidad de los vecinos, hay que buscar a un alguien en concreto que sea capaz de llegar la frontera, recogerlo y luego pues utilizarlo de forma más eficaz posible.

Hay quien dice ‘yo conozco allí a..’ ¿y es capaz de llegar con un camión a la frontera y para recoger lo que nosotros mandamos? Es que están en guerra… Por eso digo. Que todos vemos las caravanas que hay de coches, camiones etcétera para llegar a la frontera. Es decir, que nosotros tenemos tres mil kilómetros hasta la frontera y podemos llegar con un camión pero a lo mejor tardamos bastante menos que los de Ucrania en llegar a la frontera, o son incapaces de llegar o conseguir un camión… Es un tema complicado.

Ya puedes leer la segunda parte. En breve, estará disponible la parte 3.

Contenidos relacionados

Únete a la suscripción
Recibe el boletín de noticias cada lunes en tu correo electrónico, comentar, servicio de hemeroteca, completamente gratis

Noticias relacionadas
Suscribir a
Notificar a
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Destacada
Publicidad - Continúe navegando
Ahora en portada
Este contenido pertenece a Leganés Activo. No se permite la copia ni la reproducción parcial o total sin permiso.